» No hay felicidad completa

Esta nota fue creada el martes, 15 febrero, 2011 a las 11:50 hrs

El dicho aquel que reza “no hay felicidad completa’’ se puede aplicar con propiedad al anuncio hecho por el presidente Felipe Calderón sobre la deducibilidad de las colegiaturas, una demanda añeja de un importante sector de la sociedad.

Así como fue manejado, parecía como que el decreto presidencial autorizaba la deducción del 100%, para el pago de ISR, de las colegiaturas; pero no era así.

La Secretaría de Hacienda precisó los montos que se pueden deducir, dependiendo del nivel escolar: para preescolar el límite anual de deducción por hijo será sobre 14,200 pesos; en primaria, 12,900; en secundaria, 19,900; en profesional técnico, 17,100 y en bachillerato o equivalente, 24,500 pesos anuales.

En promedio, considerando los costos actuales de la educación privada, la deducción autorizada será equivalente al 33% del total anual que pagan los padres de familia porque sus hijos estudien en escuelas privadas.

Electorera o no, como la oposición ha calificado la medida, sin duda es una buena noticia para las clases medias.

En el control de daños que decidió emprender el gobernador Enrique Peña Nieto a partir de la publicación del parte médico sobre la muerte de su esposa, habrá que sumar la creación de una Fiscalía Especial para la atención de los feminicidios ocurridos en el estado de México desde hace unos años.

Además Peña prepara una iniciativa para agravar las penas de los delitos en contra de las mujeres.

Sin embargo, dos asuntos preocupan al mandatario local y a su equipo: el primero, la ola de violencia y asesinatos masivos registrados en el oriente del estado y las implicaciones del famoso caso de la niña Paulette Gebara.

En ambos casos habrá noticias en breve.

El vacío jurídico que existe en la legislación federal sobre el uso discrecional de los recursos en manos de los órganos autónomos ha propiciado debates como el del famoso “cochinillo’’ inmobiliario del IFE.

Puede, en efecto, que los 348 millones de pesos que constituyen el fondo no sean producto de “subejercicios’’ sino “remanentes de operación’’, aunque el consejero presidente Leonardo Valdés ya dijo que se trató de “ahorros’’.

Quizá la solución a este dilema sea la adopción, a nivel federal, del artículo 71 de la Ley de Presupuesto y Gasto Eficiente, del DF, publicada en diciembre del 2009.

Dicho ordenamiento, propuesto por el diputado del PRI, Octavio West, establece que “las unidades responsables de gasto’’, incluido los órganos autónomos, deberán entregar a la Secretaría de Finanzas del DF los recursos y los rendimientos obtenidos que no hayan sido devengados en el ejercicio fiscal para los que fueron aprobados.

Así se elimina la discusión de si se trató de ahorros, de remanentes o de subejercicios, que para el contribuyente que los paga –usted y yo- es exactamente lo mismo.

Beatriz Paredes rindió ayer su último informe como presidenta del PRI; se va el 4 de marzo.

El acuerdo entre la familia priísta es que se vaya en paz. Ya luego verán…





           



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