Al participar en la presentación del libro Reflexiones sobre la justicia: retos y oportunidades desde la visión de una juzgadora, la ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Yasmin Esquivel, lamentó la violencia de género cometida contra mujeres, niñas y adolescentes, en especial el delito de feminicidio.
La también presidenta del Comité Interinstitucional de Equidad de Género del Poder Judicial Federal destacó que obras como ésta, cuya autora es la consejera de la Judicatura Federal, Lilia Mónica López, ayudan a visibilizar la violencia, a las víctimas, y “nos llaman a actuar”.
“La obra retoma, desde el lente de la Juzgadora el profundo movimiento en nuestro país, por el pleno reconocimiento y respeto a los derechos de las mujeres; contra la violencia de género, aquella que se ejerce contra mujeres, niñas y adolescentes, en especial el feminicidio, que hoy día arroja cifras inusitadas, que cimbran la conciencia colectiva.
“La violencia lastima en lo más profundo a una familia, a una comunidad, hiere a la sociedad entera. La violencia se extiende, del ámbito doméstico, al ámbito laboral, a las instituciones de educación y, en general, a todos los espacios; se generaliza y, peor aún, se normaliza. Estas manifestaciones han logrado visibilizar la violencia, visibilizar a las víctimas; nos llaman a actuar. Una responsabilidad que debemos asumir todas y todos, para solidarizarnos en una acción eficaz, decidida, que, por fin, nos ponga en la ruta de erradicar todo signo de discriminación y violencia, toda manifestación de desigualdad que las nutren”, enfatizó.
En la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la ministra Esquivel Mossa también destacó cómo la autora del libro, como juzgadora, percibe que es otra la magnitud que cobra la justicia cuando se trata de la que está a cargo de los juzgadores, “que también requiere de sólidos principios y valores”.
“Sobre todo, afirma, del actuar ético y profesional de quienes tenemos en nuestras manos decisiones que afectan la libertad, la salud de las personas, el patrimonio y, finalmente, a la colectividad, y subrayo esto último, en tanto como juzgadora, tiene claro cómo nuestra acción incide no sólo respecto de las partes en una contienda, sino en una dimensión que impacta a la sociedad”, expuso.
La también presidenta de la Segunda Sala del máximo tribunal del país hizo un especial llamado a leer este libro a los hombres “que cada día conviven con nosotras y tienen la inigualable oportunidad de conocernos a través de los ojos de una gran juzgadora mexicana”.
(milenio.com)