El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) México lanzará en Playa del Carmen y Cancún, Quintana Roo, una campaña de donación en apoyo a los niños mexicanos.
El organismo recordó que sus programas en el país se financian en gran parte con donaciones solidarias, a través del programa Socios Unicef, que en esta ocasión su campaña estará vigente durante el periodo de Semana Santa, del 30 de marzo al 4 de abril.
En un comunicado precisó que el programa se aplicará a Playa del Carmen, en la Quinta Avenida y en la plaza Paseo del Carmen, así como en las plazas La Isla y Kukulkán, en Cancún, para invitar a sus residentes y visitantes a apoyar a la infancia en el país.
Dicho organismo del Sistema de Naciones Unidas trabaja para lograr los cambios que 40 millones de niñas, niños y adolescentes necesitan, con el fin de contar con mejor protección, salud y educación.
De ahí, agregó, que Unicef trabaje para que se cubran las necesidades más urgentes de la niñez en México, por ejemplo: 6.1 millones de personas de entre tres y 17 años no asisten a la escuela, por lo que impulsa la educación de calidad en las regiones marginadas del país.
Además, 1.5 millones de menores de cinco años presentan desnutrición crónica, por lo que con sus aliados, apoya programas de información nutrimental y lactancia materna.
Otro objetivo es aumentar la inclusión y equidad para mejorar las oportunidades de desarrollo de 4.7 millones de niños, niñas y adolescentes que viven en pobreza extrema.
En respuesta a la gran solidaridad que los mexicanos tienen por la niñez, el organismo creó el programa “Socios Unicef”, mediante el cual la gente puede donar para apoyar la labor por los niños.
Este programa se desarrolla desde 2011 en varias ciudades mexicanas, tales como Distrito Federal, Guadalajara, Monterrey, Puebla y Querétaro.
“Desde que empezamos la campaña en otros estados de la República Mexicana, la gente ha sido muy atenta y solidaria, con un gran interés por saber qué hace Unicef y cómo pueden apoyar a los niños”, manifestó en su texto Chris Martínez, responsable del programa.
Recordó que los jóvenes que trabajan dentro de este programa se identifican con un chaleco azul y credencial oficial; en unos minutos explican la labor del Unicef y cómo las donaciones mensuales de los socios hacen la diferencia para millones de niños en México.
A través de un formulario, toman los datos de las personas para convertirlas en Socios Unicef y “todo con las más estrictas medidas de seguridad y privacidad”, precisó.
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