La fracción de Movimiento Ciudadano en el Senado demandó la comparecencia de la secretaria de Educación Pública, Delfina Gómez, para explicar detalladamente los motivos, criterios y valoraciones para suspender el financiamiento del programa de Escuelas de Tiempo Completo.
“La Secretaría de Educación Pública (SEP) le debe una explicación a las mamás y papás de los 3.6 millones de niñas y niños afectados. No existe una razón que justifique quitarle a las y los estudiantes más marginados del país las horas extras de clase y los alimentos que las escuelas les proporcionaban”, puntualizó Clemente Castañeda, coordinador de Movimiento Ciudadano en el Senado.
En una proposición con punto de acuerdo, instó por ello a la secretaría a presentar un plan detallado sobre las políticas públicas integrales para sustituir la garantía de alimentación saludable a niños y adolescentes en situación de vulnerabilidad que cursan la educación básica.
Sostuvo que la eliminación del programa de Escuelas de Tiempo Completo afectó también a padres trabajadores, quienes podían realizar horas extras de trabajo mientras sus hijos estaban bien cuidados en la escuela.
“Por todo esto, desde el Senado solicitamos a la titular de la SEP que explique detalladamente los motivos por los que se eliminó este programa”, remarcó Castañeda.
El objetivo del programa Escuelas de Tiempo Completo era contribuir a mejorar las oportunidades de aprendizaje de los alumnos para lo cual agregaba entre 1.5 y 3.5 horas adicionales al horario escolar, beneficiando con ello a más de 3.6 millones de niños.
De ese total de alumnos beneficiados, 51 por ciento viven en zonas de alta y muy alta marginación.
Adicionalmente otorgaba alimentos a 56 por ciento de esos estudiantes, representando para el 66 por ciento el primer alimento del día.
El programa incidía directamente en la mejora de las condiciones laborales de los padres, así como en el ingreso de los hogares, elevando la participación laboral de las madres de familia en un cinco por ciento y las horas laborales en 1.8 por ciento a la semana, con un incremento promedio en sus ingresos del 36 por ciento.
Según datos oficiales, el programa beneficiaba a más de 25 mil escuelas, es decir, 12.7 por ciento del total de las escuelas públicas en el país, con 70 por ciento de los planteles siendo escuelas indígenas y 55 por ciento ubicadas en comunidades rurales.
(milenio.com)