La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) clausuró de manera total temporal una fundidora en el municipio de Zaragoza, San Luis Potosí, por carecer de medidas que eviten la contaminación del suelo y mantos freáticos.
La dependencia detalló que lo anterior se determinó luego de detectarse, durante una visita de inspección, la presencia de grandes cantidades de escoria de plomo, aún no cuantificadas, depositadas al aire libre en un predio de una hectárea.
La Profepa recordó que para fundir la escoria y/o chatarra de plomo se utilizaban dos hornos, los cuales emplean como combustible aceites lubricantes usados, considerados estos últimos como residuo peligroso de acuerdo con la Ley General para Prevención y Gestión Integral de los Residuos y su Reglamento.
Por ende, la fundición de plomo se realizaba sin contar con las medidas necesarias para evitar la contaminación atmosférica (por la emisión de partículas de plomo y la quema de aceites lubricantes usados), de suelo y mantos freáticos.
Tampoco contaba con las respectivas autorizaciones que para este tipo de actividades expide la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) para prestar el servicio de manejo de residuos peligrosos y parar utilizar combustibles alternos.
Por ese motivo la Profepa impuso la Clausura Total y Temporal a la empresa fundidora y le suspendió sus actividades, por lo que ésta no podrá reiniciar operaciones hasta que cumpla con los requerimientos normativos.
Esto es: que cuente con las autorizaciones necesarias emitidas por la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y que haya enviado a disposición final con empresas autorizadas las escorias que actualmente se encuentran en su predio.