La oposición en el Senado, advirtió que la recién aprobada Ley de Hidrocarburos también será objeto de amparos y en su momento de controversia constitucional ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) por inconstitucional.
Al argumentar su voto en contra de la iniciativa propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador, senadores del PAN, PRI, MC, PRD e incluso del PT, consideraron que es inconstitucional, toda vez se ponen barreras a la competencia, se genera incertidumbre jurídica a los inversionistas, atenta contra los derechos adquiridos por su retroactividad y provocará un aumento en los precios de los combustibles y viola tratados comerciales de los que México forma parte, como el T-MEC.
La senadora del PRI, Claudia Ruiz Massieu, presentó un voto particular a nombre de su bancada, en el que lamentó que el dictamen se construyera desde la base de la confusión y el desconocimiento de defender la soberanía nacional e impulsar prácticas monopólicas para beneficiar a Pemex.
“En su conjunto estas reformas a la Ley de Hidrocarburos desalentarán la inversión en el sector energético al promover las prácticas monopólicas, inhibirá la competencia”, destacó que las violaciones a la Constitución son evidentes, ante lo cual la aprobación de esta iniciativa tendrá como mismo destino, la declaratoria de inconstitucionalidad.
“Este afán solo puede explicarse por la obediencia de la lealtad ciega, o por la racionalización de la ausencia de resultados que se traduce en desesperación”.
La panista Xóchitl Gálvez afirmó que estas reformas atentan contra la Constitución Política y contra los derechos adquiridos por los particulares en el sector energético.
“Una vez más, por no moverla ni coma, los legisladores de Morena y sus aliados aprueban una ley que terminará en la Corte, porque así como está la iniciativa más tardará su publicación en el Diario Oficial de la Federación que en llegar a la Corte y luego ser letra muerta”.
Consideró que ya pasaron los tiempos del “monopolio del Estado sobre la economía y el desarrollo, esto estaba bien para los años ’70 del siglo pasado”.
El coordinador de la bancada de Morena, Ricardo Monreal, salió en defensa de la iniciativa y aseguró que con su aprobación se defiende la soberanía energética.
“La reforma que nos ocupa se sustenta en la necesidad de fortalecer al sector energético desde una perspectiva de soberanía nacional. (…) La reforma privatizadora del sector energético mexicano de esta época, trae un pecado original, aceptémoslo un vicio de origen, la prevaricación. Me pregunto y les pregunto, ¿es legítima una reforma cuya aprobación es producto del soborno, el cohecho y de la corrupción?, es decir, de la compra del voto de legisladores con dinero público-privado”.
Y aseguro que las reformas “fortalecerán las funciones del Estado Mexicano y que van a garantizar la seguridad energética del país, permitirán combatir de manera frontal la corrupción y las diversas actividades ilícitas en materia de hidrocarburos y petrolíferos, y coadyuvarán a fortalecer las empresas productivas del Estado Mexicano, como garantes de la seguridad y Secretaría energética, y aportarán las bases normativas necesarias, para garantizar el suministro de hidrocarburos”.
(24-horas.mx)