México preside los trabajos de la Conferencia de Estados Parte del Tratado sobre el Comercio de Armas, primer acuerdo global jurídicamente vinculante, que regula la compra-venta de armas convencionales, informó la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
En un comunicado, la cancillería señaló que la Presidencia de México busca contribuir de manera neutral y transparente a la toma de decisiones sobre los principales aspectos institucionales y de procedimiento previstos en el régimen del tratado, que permitirán su instrumentación plena y eficaz.
Refirió que en una reunión se abordaron las principales cuestiones que dotarán de estructura al tratado, entre las que destacan el reglamento, formato, mandato y configuración de la futura Secretaría Permanente y la reglamentación financiera.
Así como cuestiones técnicas, cruciales para asegurar la eficacia del tratado, tales como los informes nacionales que los Estados Parte deberán presentar para garantizar el comercio lícito de armas y evitar su desvío.
Este tratado es el primer acuerdo global, jurídicamente vinculante, que regula el comercio de armas convencionales, y establece un marco jurídico de responsabilidad y transparencia en las transferencias internacionales de estas armas.
Tras la entrada en vigor del tratado, el pasado 24 de diciembre, 62 Estados lo han ratificado y 130 lo han suscrito.
La SRE detalló que en Puerto España, Trinidad y Tobago, se celebró la reunión formal para preparar la Primera Conferencia de los Estados Partes (1CEP) del Tratado sobre el Comercio de Armas (ATT).
Participaron delegados de 82 Estados, además de funcionarios de organismos internacionales, organizaciones regionales y representantes de la sociedad civil.
La Cancillería mexicana afirmó que se acordó que las próximas reuniones del proceso preparatorio se llevarán a cabo en Viena, los días 20 y 21 de abril, y en Ginebra, del 6 al 8 de julio. La Ciudad de México será la sede de la Primera Conferencia de los Estados Partes, del 24 al 27 de agosto.
La delegación de México estuvo conformada por el embajador de México en Trinidad y Tobago, Mario Arriola Woog; la directora general para la Organización de las Naciones Unidas, consejera Ana Paola Barbosa, así como por funcionarios de las secretarías de la Defensa Nacional y de Relaciones Exteriores.