Pedro Joaquin Coldwell ex presidente nacional del PRI y recientemente acusado por el actual dirigente del partido, Alejandro Moreno, de haberlo difamado, está analizando los resultados de la última Asamblea Nacional para poder impugnar los nuevos estatutos resueltos.
La última Asamblea Nacional priista resolvió otorgar la capacidad de reelección al presidente nacional del partido por hasta tres periodos de cuatro años y quitarle facultades a los comités directivos del PRI desatando acusaciones de un proceso autocrático y de centralización del poder en el partido.
“Estamos analizando las elecciones para ver qué resultados tenemos para poder impugnar esta Asamblea Nacional porque pone en riesgo al partido.
“Se han recibido llamadas de dirigentes destacados en todo el país que se han sentido agraviados tanto por cómo se llevó la asamblea como por los cambios estatutarios que se están haciendo”, explicó Joaquín Coldwell.
Según el presidente nacional del Revolucionario Institucional, Alejandro Moreno, al menos 3 mil consejeros están a favor de estos nuevos estatutos, aunque otra parte del partido lo ha acusado de fabricar estas nuevas normativas “a media del dirigente nacional para que el PRI tenga dueño”.
“El partido no puede tener dueño, tiene dirigentes que cumplen un ciclo, un plazo corto para el que fueron electos y debe renovarse. Esto no lo estamos viendo en estos cambios. Parecen estatutos hechos a la medida del dirigente nacional para que el PRI tenga dueño”, añadió Coldwell.
Francisco Labastida critica reelección de Alejandro Moreno:
Las nuevas medidas permiten la reelección de los dirigentes a nivel nacional, estatal y municipal, lo que Coldwell advierte que frenará la renovación de cuadros dentro del partido y logrará que el electorado castigue al PRI tras haber “perdido una fuerza electoral enorme” en estas últimas elecciones.
Coldwell ha pedido que lo resuelto en esta Asamblea Nacional sea descartado y que se realice una nueva que contemple a disidencias del partido, las cuales fueron “excluidas”
“No estamos difamando absolutamente a nadie, lo que queremos es lo mejor para el partido: que se anule esta Asamblea Nacional que se organice otra sobre la base de un trabajo preparatorio serio, que se hagan consenso sobre las militancias sobre los puntos para renovar al PRI y que se elimine la reelección consecutiva de los dirigentes sobre todo por tantos periodos.
“Si el dirigente tiene la templanza y la grandeza para abrirse al debate con los grupos disidentes que no estamos de acuerdo con la asamblea y con los cambios, creo que el PRI va a dar un gran paso”, añadió Coldwell.
(milenio.com)