El presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, visitará México el 13 de marzo próximo, para reunirse con su homólogo Enrique Peña Nieto.
Los cancilleres de México, José Antonio Meade Kuribreña, y de Guatemala, Carlos Raúl Morales, así lo dieron a conocer en el marco de una reunión en la que dialogaron sobre la agenda bilateral en temas como migración, seguridad y energía.
En conferencia de prensa conjunta, coincidieron en que la migración es uno de los aspectos más importantes en la relación, por lo que acordaron medidas para ordenar el flujo de personas.
Meade Kuribreña destacó que el encuentro entre ambos cancilleres tuvo el objetivo de definir la agenda en materias como la energética y fronteriza, a fin de mejorar los espacios y el entorno para los migrantes.
Subrayó que México y Guatemala han sido creativos, pues establecieron una forma novedosa de hacer política migratoria en la que se reconoce la vida fronteriza como un derecho a las visitas familiares y de trabajo en un entorno jurídico cierto.
Entre esas metas citó la modernización de la infraestructura fronteriza, como el incremento de pasos fronterizos de ocho a 10, que operen de una manera ordenada y combatir el tráfico de personas, armas y drogas.
El titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) enfatizó que dentro de esa “amplia y profunda agenda” también se encuentran proyectos de desarrollo energético como el gasoducto que distribuirá gas hacia Centroamérica”.
El proyecto de dicha obra se encuentra bajo el análisis del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para definir la demanda y concretarlo.
En su oportunidad el canciller de Guatemala reconoció los esfuerzos de mejorar las condiciones fronterizas que alcanzan las naciones con El Salvador y Honduras, con las que integran el llamado Triángulo del Norte.
Dio a conocer que como parte de la mejora migratoria, su país prevé la apertura de 16 consulados, 10 en Estados Unidos, con las que sumarían 25 en esa nación; dos en Canadá y cuatro en México, tentativamente en las ciudades de Monterrey, Nuevo León; Villahermosa, Tabasco; Mérida, Yucatán, y San Luis Potosí.
La decisión de instalarlos en esas ciudades tiene que ver con que los consulados se encuentren en la llamada ruta del migrante, en su paso hacia Estados Unidos y que se les pueda brindar asistencia.
El canciller guatemalteco calificó de exitosos los programas de trabajador temporal y visitante local puestos en marcha por el gobierno de México, los cuales permiten a ciudadanos de ese país trabajar de manera legal y exigir derechos laborales.
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