La reducción de los niveles de pobreza y la consolidación de una clase media cada vez más dinámica en América Latina son resultado de las políticas públicas implementadas por los países de la región, señaló el titular de la SRE, José Antonio Meade Kuribreña.
En el marco de la Tercera Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), destacó ante los mandatarios que participan en ese foro que en los últimos 12 años la incidencia de la pobreza en la población total en América Latina y el Caribe disminuyó de 45 a 28 por ciento.
Refirió que “la pobreza extrema pasó de 22 por ciento a 11 por ciento y la clase media aumentó 12 por ciento, lo que representa actualmente una tercera parte de la población de la región, cifra que supera, por primera vez en la historia, al número de personas que se encuentran por debajo del umbral de la pobreza”.
“Se trata de avances significativos sin duda, pero el desafío sigue siendo enorme”, apuntó el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), quien participa en dicha cumbre en representación del presidente Enrique Peña Nieto.
Subrayó que el gobierno federal trabaja de manera decidida para enfrentar el hambre y la pobreza mediante la generación de un entorno que permita el crecimiento económico sostenido e inherente a la competitividad con el fin de elevar la calidad de vida de todos los mexicanos.
En su intervención en el plenario de la Cumbre de la Celac, Meade Kuribreña habló sobre la importancia y el alcance de las 11 reformas estructurales aprobadas en los últimos meses con el concurso responsable de las fuerzas políticas del país, en sectores claves como la educación, energía, telecomunicaciones y financiero.
En ese contexto, recordó que en 2014 en México se crearon más de 700 mil nuevos empleos formales, cifra que representó un incremento de 54 por ciento respecto al año anterior.
“Hoy, los mexicanos tenemos acceso a más y mejores oportunidades laborales, así como a los beneficios de la amplia red de seguridad social en materia de vivienda, salud y educación”, manifestó.
El canciller mexicano comentó que América Latina y el Caribe es una región diversa y plural por vocación, y en ello reside su mayor riqueza.
Por ello, abundó, “se tiene que fortalecer el diálogo y ser una región que tienda puentes de entendimiento y encuentro para identificar estrategias que contribuyan a la consecución de nuestros objetivos de desarrollo”.
Respecto a la nueva era de relaciones entre Cuba y Estados Unidos, consideró que es un hito por demás relevante, cuyas pautas marcarán ambos gobiernos, y aseguró que lo acompañarán México y la Celac.
En ese tenor, instó a los miembros de la Celac, como lo señalara el presidente de Cuba, Raúl Castro en su discurso pronunciado en este foro, a dar muestra del “arte de la convivencia civilizada, basada en el respeto a las diferencias, pues el diálogo así enmarcado es el que ayuda a solucionar nuestros desafíos”.
Finalmente, destacó las medidas administrativas que “beneficiarán a muchos de nuestros compatriotas que viven en Estados Unidos y que han contribuido de manera significativa a la economía y sociedad de ese país”.