La empresa tecnológica Healables Digital Health desarrolla dispositivos portátiles que tienen la capacidad de aliviar el dolor crónico al grado de que los pacientes podrían sustituir algunos medicamentos de prescripción que han desatado de las peores crisis sanitarias en Estados Unidos por el consumo, bajo receta, de opioides legales altamente adictivos y letales.
Marco Van Der Putten Landau, director de desarrollo de negocios y asociaciones estratégicas de Healables Digital Health, establecido en Israel, explicó que: “Buscamos ofrecer una alternativa sin efectos secundarios severos, esta puede ser aplicada mientras las personas realizan actividades diarias, sin la necesidad de recurrir a medicamentos adictivos que los limitan en su funcionamiento”.
Asimismo, detalló que los dispositivos desarrollados a partir de inteligencia artificial son textiles portátiles, bioeléctricos que se colocan en brazos, rodillas y piernas, en donde el paciente recibirá, sin percibirlo, microcorrientes subsensoriales, terapias de bajo voltaje dirigidas a células y a fibras nerviosas, con lo que lograrán reducir la inflamación y eliminar el dolor.
Los dispositivos, además, logran a través de esas vibraciones que se eleve la producción de trifosfato de adenosina o ATP, como se conoce a la molécula clave para elevar la energía en el metabolismo de toda persona.
“La modulación de la energía es diferente para cada condición. Hemos integrado electrodos en las mangas, con conductores textiles, para dirigir la microcorriente hacia articulaciones y músculos específicos. Cada persona reacciona de manera diferente, y la adaptabilidad de nuestra tecnología permite personalizar la experiencia del usuario”.
Los resultados obtenidos a través de algunos de sus protocolos de investigación muestran que 88 por ciento de los usuarios que han utilizado el dispositivo con mangas, percibieron una reducción de hasta 50 por ciento el dolor y mejoraron su productividad.
“También hemos tenido usuarios que empezaron con una escala de dolor de ocho o nueve (cuya intensidad es de alta a muy alta) y luego experimentaron una reducción de hasta dos o tres (baja, soportable e imperceptible). Algunos usuarios han experimentado mejoras significativas”, aseveró Marco van der Putten Landau.
Del mismo modo, los expertos indicaron que “si el dolor regresa, pueden seguir utilizando la tecnología. Hay personas que experimentan una rápida recuperación y disminución del dolor, mientras que otras pueden tardar más, cada situación es diferente”.
En la actualidad, se encuentran en pláticas con diversos centros de excelencia para aplicar sus dispositivos en grupos seleccionados de pacientes, como es el caso Sheba Medical Center.
“Hemos desarrollado mangas y gorros. Estamos en negociaciones con uno de los mayores centros de fibromialgia en Israel para que utilicen nuestro gorro como parte de sus terapias. También hemos creado calcetines para la neuropatía diabética”, añadió.
“Incorporamos la tecnología de microcorriente, una forma de electricidad mil veces más pequeña que un miliamperio, para ofrecer soluciones personalizadas para el alivio del dolor. Esta tecnología ha sido objeto de más de 175 artículos publicados. Nuestro desafío ha sido lograr que los pacientes utilicen esta tecnología y coordinar tratamientos efectivos con base a las necesidades individuales de cada persona”, explicó en entrevista el desarrollador de dicha empresa ubicada en Israel.
Replicó que esta tecnología ha sido utilizada en deportistas, corredores y futbolistas y que actualmente la compañía centra sus esfuerzos en convertirse en otorgar soluciones médicas entre pacientes con enfermedades crónicas y complejas, como es el caso de la fibromialgia, trastorno que se caracteriza por dolor musculoesquelético generalizado acompañado por fatiga y problemas de sueño, memoria y estado de ánimo.
“Nuestros estudios han demostrado que la microcorriente es efectiva donde hay inflamación. La inflamación es un componente común en diversas afecciones, y nuestra tecnología ofrece una solución adaptable a las necesidades individuales de cada paciente”.
También abundó que trabajan en el tratamiento de diversas condiciones como retinopatía, neuropatía diabética, migraña e inflamación pulmonar. “Actualmente, llevamos a cabo ensayos clínicos en Israel para obtener la certificación de dispositivo médico y acceder al ámbito médico en Bélgica. Esta tecnología puede beneficiar varias partes del cuerpo, y hemos adaptado su uso aplicando protocolos específicos y considerando la condición médica del usuario”, explicó.
Del mismo modo, Marco Van Der Putten recordó que este dispositivo permite que a través de su dispositivo móvil, el usuario pueda monitorear los avances de su cuadro clínico.
(milenio.com)