La Comisión Permanente del Congreso de la Unión condenó la violencia ocasionada el viernes 1 de mayo por grupos del crimen organizado en Jalisco y respaldó las acciones de los gobiernos federal y estatal para combatir la inseguridad.
Durante su primera sesión los legisladores también guardaron un minuto de silencio en memoria de los militares y policías fallecidos, al tiempo que reiteraron su solidaridad con los integrantes de fuerzas de seguridad que trabajan para eliminar ese flagelo.
En tribuna el senador priista Arturo Zamora Jiménez dio lectura a un pronunciamiento de la Mesa Directiva, que fue avalado por todos los grupos parlamentarios y por el pleno, en el cual se repudia “una de las jornadas más violentas ocasionadas por el narcotráfico en México”.
El legislador del Partido Revolucionario Institucional (PRI) expuso que el despliegue del Operativo Jalisco ocasionó que integrantes de una organización criminal, al verse afectados, reaccionaran con violencia extrema.
Esos ataques tuvieran como consecuencia la pérdida de la vida de seis integrantes de las Fuerzas Armadas Mexicana, así como también de un agente de la policía investigadora de esta entidad.
De ahí que expresara la solidaridad de senadores y diputados con los servidores públicos de las corporaciones de seguridad, las Fuerzas Armadas, la Marina, la Policía Federal y todas las organizaciones del Estado que trabajan de manera conjunta para eliminar la violencia producto de la delincuencia.
También externó el respaldo del Congreso y su apoyo a la determinación que ha tomado el Estado mexicano de aplicar el Operativo Jalisco, y confió en que sus resultados que seguramente devendrán en garantizar la tranquilidad de los habitantes de ese estado.
“Es momento clave para trabajar todos los Poderes del Estado en función de garantizar el principio de la legalidad y de garantizar, ante la reacción violenta de las organizaciones criminales, un trabajo que nos vincule con la sociedad y un trabajo hacia el respeto del Derecho y de las libertades de los demás”, opinó Zamora Jiménez.
El diputado federal Juan Pablo Adame Alemán, del Partido Acción Nacional, respaldó ese pronunciamiento e hizo votos porque los tres órdenes de gobierno y la sociedad sumen esfuerzos para revertir la violencia generada por el crimen y el desafío al Estado mexicano, al derribar un helicóptero que provocó la muerte de militares.
Amalia García Medina, diputada del Partido de la Revolución Democrática, también repudió la violencia en varias entidades y recordó que en la actual administración del gobierno jalisciense han sido asesinados más de 100 funcionarios municipales y estatales.
Después de los pronunciamientos de todos los grupos parlamentarios, el presidente de la Mesa Directiva de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, Luis Miguel Barbosa Huerta, decretó un minuto de silencio en memoria de los militares y policías fallecidos el 1 de mayo.
En entrevista por separado el coordinador de los diputados priistas, Manlio Fabio Beltrones Rivera, subrayó que “no podemos permitir ningún coto de impunidad para a la delincuencia”.
“Ahora hay que ir por la cabeza visible del delincuente mayor en Jalisco, que es el denominado “el Mencho’; con eso estoy seguro que se coronaría la acción del gobierno y, sobre todo, se restablecería el orden”, dijo el legislador del PRI.
Miguel Alonso Raya, líder de la bancada perredista en la Cámara de Diputados, afirmó que lo sucedido el viernes pasado en esa entidad es un abierto reto de la delincuencia al Estado mexicano y amerita una respuesta del gobierno de la misma proporción.
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