Que gusto da ver el Clásico Nacional, un juego que no pierde vigencia, que se compite con el alma y que se decide en los detalles. Que gusto da ver el estadio Azteca lleno de amarillo y rojiblanco. Lo ganó América 2-1 porque tiene mejor pegada y más temple que los rojiblancos.
No podía iniciar de mejor manera el Clásico, con un gol que cambiara los papeles de inmediato. Y eso ocurrió cuando el partido registraba sus primeros latidos, fueron los americanistas los de mejores pulsaciones.
Rápido se encontraron con una acción en la que Henry peleó el balón por la banda derecha, a base de pulmones, el yucateco superó la marca de Olivas, quien se barrió y alcanzó a conectar un pie del azulcrema. El árbitro, Adonai Escobedo, no dudó, pitó penal y se mantuvo en su decisión.
Henry lo cobró, el yucateco no dudó, cobró con fuerza y puso adelante a las Águilas apenas al minuto 2; explotó el Azteca y se auguraba un duelo a corazón abierto, más cuando Valdés rozó el segundo, pero una buena atajada del Wacho Jiménez impidió el festejo del chileno.
El Rebaño se repuso rápido, se olvidó de lamentos y se lanzó a competir. Dio una buena imagen el equipo de Cadena que le empezó a ganar la media cancha al cuadro de Ortiz. Y si en América no gobiernan Richard y Fidalgo, el equipo no carbura como está acostumbrado.
Lucía bien Chivas con Flores, Beltrán y Alvarado en medio campo, pero la proyección en ataque tampoco le resultaba al Rebaño que si bien tenía más tiempo la bola, no inquietaba a Ochoa.
América concedía mucho terreno, pero en la retaguardia lucía sólido, le hacía falta al equipo del Tano encontrar a Valdés y a Cabecita, porque cuando lo hacía generaba peligro, de hecho Diego acarició el segundo en un tiro de media distancia y luego puso una gran asistencia a Zendejas, pero éste se precipitó en la definición y de nuevo el Wacho evitó el daño.
El empate para Chivas estuvo en los pies de Alexis Vega, el delantero controló un pase filtrado, le ganó por velocidad a Araujo, pero cuando se preparaba para chutar a gol, una gran barrida de Cáceres lo desarmó, el propio Alexis percutió de media distancia, pero Ochoa le puso con seriedad los puños al disparo.
Ventaja mínima para América que fue de menos a más y aunque cerró con mejor cara, le costaba el juego en la medular. Esa ida de que se podía llevar a Chivas por delante se disipó sobre el campo de juego.
En el complemento las mismas pulsaciones, no terminaba de prender el encuentro, sí, los dos lo competían con gallardía, pero faltaban emociones en las áreas. Eso se acabó en cuanto las Águilas tomaron la pelota y la manejaron como saben.
Valdés abrió la jugada a la banda derecha, centro de Lara, Henry compitió por la bola en el área, le ganó a dos marcadores, se la bajó con la cabeza a Zendejas, quien la mató y chutó con la derecha, el balón se escurrió entre las piernas de Olivas y venció al Wacho. Chivas estaba contra las cuerdas.
Ahora sí un Clásico como se esperaba, Chivas debía asumir riesgos; habría espacios para las Águilas que buscarían liquidarlo en una contra. Cadena mandó al Chicote y a Cisneros por Zaldívar y Brizuela. Y justo el Chicote marcó el descuento al 61’, en una jugada a balón detenido. Aunque América reclamó una falta, el VAR validó el gol.
Quedaba media hora vibrante, Chivas se envalentonó, América no cambió su plan, era aguantar y buscar el espacio para matar el partido. El Tano Ortiz mandó a Brian por Zendejas, Viñas por Henry y Aquino por Richard. Máxima tensión y el partido a la ruleta rusa. Tuvo la bala de la suerte el Cabecita, pero sacó un remate chorreado. Y después el travesaño le dio vida a los rojiblancos y un gran lamento a los azulcrema.
Nervio hasta el final, pero no hubo más. Para Chivas es un consuelo muy pobre decir que juega bien y compite, porque al final se va con la amargura de la derrota.
América se lleva el Clásico Nacional, no arrolló a Chivas como muchos auguraban, pero cantó victoria, este torneo sometió a sus tres grandes rivales -algo que no ocurría desde el Apertura 2017- y sigue como líder. Anótenlo como principal candidato al título de Liga.
(milenio.com)