Al ejecutar la orden de aprehensión por el caso Ayotzinapa, agentes de la Policía Federal Ministerial de la Fiscalía General de la República (FGR) confundieron a Jesús Murillo Karam con su hermano, a quien detuvieron por error en primera instancia el viernes pasado.
Así lo reveló la defensa legal del ex titular de la Procuraduría General de la República durante la audiencia inicial de este sábado en el Centro de Justicia Penal Federal del reclusorio Norte.
Al discutirse la legalidad en la detención del funcionario en el gobierno de Enrique Peña Nieto se reveló que, al darse cuenta que su hermano había sido capturado, Murillo Karam se puso a disposición de la FGR de manera voluntaria.
El abogado Javier López García sostuvo que Murillo Karam quería que constara en los registros judiciales que se había entregado.
En esta parte de la audiencia, los agentes del Ministerio Público de la Federación detallaron que la orden de aprehensión se cumplimentó a las 15:30 horas al exterior del domicilio particular de Murillo Karam en la calle Montañas Calizas número 414 en la colonia Lomas de Chapultepec, alcaldía Miguel Hidalgo.
En la narrativa de la FGR, desde las 12:45 horas, autoridades federales ya se encontraban en las inmediaciones de la residencia del ex titular de la PGR llevando a cabo “vigilancias fijas y móviles”.
Los agentes de la Representación Social de la Federación también relataron que, tras ser aprehendido, Murillo Karam fue trasladado a la subdelegación de la FGR ubicada en Tacubaya.
A las 16:10 horas, abundaron, se le practicó el dictamen de integridad física y a las 17:00 horas, el ex gobernador priista de Hidalgo realizó una llamada telefónica.
La defensa legal de Murillo Karam pidió saber a qué hora había sido puesto a disposición del juez de Control, luego de su aprehensión.
Los agentes del Ministerio Público de la Federación no respondieron este cuestionamiento y solo revelaron que a las 21:18 horas -es decir, casi seis después de su captura-, solicitaron, vía electrónica, que se fijara hora y fecha para la realización de la audiencia inicial.
Al final, el juez Marco Antonio Fuerte Tapia determinó que se cumplieron los elementos de legalidad en la captura del titular de la PGR de 2012 a 2015.
(milenio.com)