El Supremo de Alemania confirmó las penas decretadas en 2019 a la empresa armamentística alemana Heckler & Koch por la venta ilegal de unos 4.219 fusiles de asalto a zonas en conflicto en México.
El Tribunal Supremo alemán ratificó hoy las condenas impuestas en 2019 contra la empresa armamentística Heckler & Koch y dos de sus empleados por exportación ilegal de armas a México.
La empresa deberá pagar una multa de tres millones de euros, según la sentencia de la corte alemana, con sede en Karlsruhe (suroeste del país). Asimismo, se ratificaron las penas de libertad condicional contra dos procesados.
El caso remitía a la venta ilegal de unos 4.219 fusiles de asalto G36 y componentes armamentísticos a zonas en conflicto en México, para las que no se autorizan esas exportaciones.
Penas y multas
La audiencia de Stuttgart declaró en febrero de 2019 culpables a dos de los cinco empleados inicialmente encausados. Se les condenó a penas de un año y diez meses de libertad condicional, además de una multa de 80.000 euros, y de un año y cinco meses de libertad condicional. Los otros tres acusados fueron absueltos.
La propia empresa no estaba acusada, pero se le impuso una multa de más de tres millones de euros, correspondiente a la cantidad ingresada por esa venta ilegal. Los abogados de Heckler & Koch recurrieron la sentencia, mientras que la Fiscalía pidió una revisión de las penas a los procesados.
Armas en Ayotzinapa
La venta de ese armamento se produjo entre 2006 y 2009, y los suministros llegaron a regiones en conflicto.
Para posibilitar ese negocio se presentó documentación falsa al Ministerio de Industria alemán sobre el destino final de las armas.
La exportación ilegal salió a la luz a raíz de las denuncias de activistas pro derechos humanos, que documentaron cómo esas armas habían ido a parar a zonas en conflicto, como Jalisco, Chiapas, Chihuahua y Guerrero. Investigaciones de medios revelaron que algunos de los fusiles de asalto de Heckler & Koch fueron utilizados en la desaparición de estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa.
(dw.com)