México ha acumulado un “arsenal” de 270 mil millones de dólares desde 2008 para enfrentar cualquier contingencia que pudiera presentarse por la “tormenta” internacional, destacó el gobernador del Banco de México (Banxico), Agustín Carstens.
Al comparecer ante la Comisión de Hacienda y Cuenta Pública del Senado de la República, precisó que este “arsenal” considera más de 195 mil millones de dólares del saldo de las reservas internacionales y la línea de crédito flexible por 70 mil millones de dólares que México contrató con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Aseguró que desde 2008 y 2009, cuando inició la crisis financiera global, México se ha preparado para enfrentar el entorno internacional, ante la reciente caída de los precios internacionales del petróleo, debilidad en la economía mundial y la inminente alza en las tasas de interés en Estados Unidos.
“Hemos tratado de tener la mejor coordinación posible con la política fiscal y hemos tratado más que nada de acumular ahora sí que el ‘parque’ para enfrentar posibles salidas de capitales que resulten de este entorno, y muy en particular, de la revisión de la política monetaria en Estados Unidos”, expresó.
Carstens afirmó que la economía mexicana observa un proceso de recuperación sostenido, que aunque “ha sido moderado”, se empezará a acelerar una vez que se comiencen a ver resultados de las reformas estructurales, en particular de la energética.
Aseguró que el Banxico ha cumplido su objetivo de lograr una inflación baja y estable, y anticipó que este año cerrará por debajo de la meta de 3.0 por ciento y en 2016 ubicarse en un nivel cercano a dicha tasa.
Recordó que recientemente, el instituto central ajustó sus pronósticos de crecimiento de México para 2015 de un rango de 3.0 y 4.0 por ciento a 2.5 y 3.5 por ciento, mientras que para 2016 lo modificó de un intervalo de 3.2 y 4.2 por ciento a otro de 2.9 y 3.9 por ciento.
Agustín Carstens mencionó que datos recientes muestran que la economía mexicana presenta una “tendencia ascendente” y anticipó que se empezará a acelerar ante la recuperación económica que inicia Estados Unidos, y una vez que se observen los resultados de las reformas estructurales.
Consideró que la implementación y resultados positivos de las reformas aprobadas le permitiría al país entrar en un “círculo virtuoso”, pues estos cambios generarán más y mejores empleos y salarios, lo que se reflejará en más inversión y crecimiento.
Sobre la inflación, destacó que en la primera quincena de abril de 2015 –dato dado a conocer hoy- los precios al consumidor cayeron 0.45 por ciento y la inflación anual se ubicó en 3.03 por ciento, por la caída de precios en las gasolinas en la frontera, de algunos productos agropecuarios y de precios y tarifas determinados por los tres niveles de gobierno.
Carstens aseguró también que hasta ahora el efecto de la depreciación de la moneda nacional sobre los precios ha sido conforme a lo previsto, sin que hasta haya generado efectos de segundo orden.
Con este resultado positivo, prácticamente la inflación está en el objetivo del Banxico, de una tasa de 3.0 por ciento, y este año cerrará debajo de esa tasa y el próximo se ubicará alrededor de ese nivel, puntualizó.