La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, en inglés) autorizó el almacenamiento, de forma alternativa, de las vacunas contra COVID-19 de Pfizer en congeladores de uso farmacéutico, donde estas permanecen a temperaturas más altas que las previamente recomendadas.
Puntualmente, los congeladores farmacéuticos suelen funcionar a -20 grados Celsius, una diferencia sustancial de los -80 y -60 C° requeridos antes para almacenar las dosis. Sin embargo, advirtieron que las vacunas antiCOVID deben mantenerse a esa temperatura por dos semanas.
“La temperatura alternativa para el transporte y almacenamiento ayudará a aliviar la carga de adquirir equipo de almacenamiento en frío ultra bajo para los lugares de vacunación y debería ayudar a llevar la vacuna a más sitios”, dijo Peter Marks, director del Centro de Evaluación e Investigación Biológica de la FDA.
La medida se tomó después de que Pfizer presentará una solicitud, tras los resultados obtenidos en su investigación sobre la estabilidad de la vacuna a temperaturas más altas.
La vacuna Pfizer se basa en una nueva tecnología que utiliza moléculas sintéticas de ARNm (ácido ribonucleico mensajero) que entregan instrucciones genéticas para que las células humanas creen una parte del coronavirus.
Las moléculas de ARNm están encerradas en partículas de grasa para protegerlas y requieren medidas de almacenamiento más bajas.
Una vez descongelados, los viales se pueden almacenar hasta cinco días a una temperatura de entre 2 y 8 grados Cº. A temperatura ambiente no duran más de dos horas.
(milenio.com)