Los recursos públicos que ejerce el gobierno siguen siendo utilizados de manera ilegal para financiar campañas políticas, reprochó el presidente del Sistema Nacional Anticorrupción (SNA), Francisco Raúl Álvarez Córdoba.
Álvarez Córdoba advirtió que la corrupción persistente en México es tan grave que los resultados en su lucha han sido insuficientes y han quedado opacados.
“Las instituciones de diferentes órdenes de gobierno y de otros poderes públicos siguen siendo utilizadas, lamentablemente, no en todos los casos, pero en algunos, como negocios particulares de los cuales se obtienen recursos millonarios, por ejemplo, para financiar campañas políticas”, dijo al participar en la instalación de la Asamblea General del SNA, que por primera vez sesionó, luego de cinco años de su creación, con la participación de presidentes de sistemas anticorrupción de los estados.
Álvarez advirtió que en estos años se derrumbó el mito de que la corrupción se acabaría por decreto con la sola creación del SNA, al interior del cual, dijo, no se ha dado la coordinación que se esperaba en un principio entre las instituciones que la conforman.
“Dimos por hecho que todos los involucrados habríamos de coordinarnos y colaborar entre nosotros de forma orgánica para atender las causas y efectos de la corrupción, lo cierto es que esto no ha podido ser controlado de manera efectiva, los resultados aún resultan insuficientes y hay mucho camino por recorrer”, dijo.
La celebración de dicha Asamblea General representa el inicio de una segunda fase del SNA, luego de que en la primera se crearon las leyes y se fortalecieron las instituciones encargadas de controlar la corrupción.
“En esta etapa, se sentaron las bases para fortalecer e iniciar los procesos de evaluación de las políticas públicas, se abrieron también canales de participación efectivos, se han creado estrategias para mejorar la calidad de la información.
“Sin embargo, la corrupción, como fenómeno multifacético, ha rebasado nuestra capacidad de espera, es decir, la realidad y los efectos de ésta son tan graves que opacan los resultados institucionales alcanzados”, lamentó Álvarez, quien preside el SNA al ser, a su vez, el presidente del Comité de Participación Ciudadana (CPC) del sistema.
“Por ejemplo, la corrupción en todas sus modalidades sigue capturando a las instituciones públicas en beneficio de grupos particulares o personas que las utilizan para sus fines personales; así por ejemplo, una persona que transgrede la ley, pero tiene los contactos y el dinero necesarios, puede evadir la justicia o bien, ocuparla en contra de alguna otra persona”, reclamó.
“La opacidad y la falta de vigilancia en los programas sociales sigue siendo un factor que permite que sean utilizados para distraer los recursos públicos orientados originalmente a atender las demandas más sentidas de la población, sobre todo, aquella en situación de vulnerabilidad, lo cual ha venido generando todavía más brechas de desigualdad y mucho más profundas”, acusó ante los titulares de la Auditoría Superior de la Federación, David Colmenares, y de la Secretaría de la Función Pública, Roberto Salcedo, que, entre otros, forman parte del comité coordinador del SNA.
“También, por ejemplo, las compras públicas siguen siendo utilizadas por empresas y servidores públicos para amasar fortunas en detrimento de la calidad de bienes y servicios públicos o deteriorando la infraestructura educativa, de salud o carretera de nuestro país, pero esto no es un fenómeno exclusivo del sector público, sino también del privado y del social”, añadió.
“Por eso, mucho debemos hacer por fortalecer este Sistema Nacional Anticorrupción con la visión pública, pero también privada y social, para hacernos no sólo copartícipes sino también corresponsables de esta lucha”, llamó.
El presidente del SNA reprochó que este tipo de conductas reiteradas y sistemáticas sigan minando las capacidades de todas las autoridades para atender los diferentes retos y problemas públicos de nuestra sociedad, como la inseguridad, la pobreza extrema, la falta de oportunidades de empleo, entre otros.
(milenio.com)