Berlín.- El copiloto de Germanwings, Andreas Lubitz, estuvo en tratamiento psicológico debido a que presentaba un elevado grado de tendencia al suicidio, pero esta condición la presentó antes de iniciar su carrera profesional en Lufthansa.
Así lo informó este lunes la Fiscalía de Düsseldorf en un comunicado en el que señaló que continúa con la revisión de los materiales decomisados en los dos departamentos de Lubitz y que sigue interrogando a una serie de “testigos” que lo conocían en lo personal y en lo profesional.
La Fiscalía apuntó que la aerolínea Lufthansa, matriz de Germanwings, no tenía conocimiento del padecimiento psicológico de Lubitz y que en los exámenes médicos periódicos que se le realizaron al copiloto éste no mostró indicios de agresión contra sí mismo ni contra los demás.
La fuente puso de manifiesto que la información anterior está derivada directamente de los materiales fácticos con que cuenta y que no se trata de especulaciones sobre los posibles motivos del accidente de la aeronave de Germanwings el martes pasado.
Subrayó que hasta el momento no se cuenta con una carta, como las que suelen escribir los suicidas para explicar su acción, ni tampoco hay una aceptación expresa que indique que Lubitz tenía un motivo para haber estrellado el avión con 149 personas más en el sur de los Alpes franceses.
La Fiscalía agregó que tampoco cuenta con indicios o pruebas procedentes del círculo familiar y/o laboral de Lubitz, de 27 años, que hubiera tenido un motivo para conducir la aeronave llena de pasajeros a la destrucción.
Puntualizó que no hay tampoco indicios de que el copiloto padeciera disturbios orgánicos. Recibió varias veces incapacidades médicas, pero ninguna de ellas por razones sicológicas.