La Bolsa Mexicana de Valores (BMV) confía en que en breve el sector de la vivienda vuelta a tomar la participación que tenía en el mercado de valores y en su principal indicador accionario, ante el dinamismo que presenta la industria.
El presidente de la BMV, Jaime Ruiz Sacristán, aseguró que desde hace años, el mercado de valores es un factor fundamental para el desarrollo de la vivienda en el país y ofrece diversas opciones por medio de deuda, acciones o fideicomisos de inversión en bienes raíces (Fibras) para todas las empresas que lo conforman.
“Esperamos en la Bolsa que en breve el sector de vivienda vuelva a tomar la posición que tenía dentro del IPC con las empresas que cotizan, y nuevas empresas que puedan participar con nosotros”, dijo durante su participación en el XXVIII Encuentro Nacional de Vivienda, organizado por la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de Vivienda (Canadevi).
Esto después de que tres de las seis empresas que cotizan en la BMV, las más grandes del país Geo, Urbi y Homex, enfrentaron una crisis financiera que las llevó concurso mercantil, y se espera que estén próximas a salir de ese proceso.
Eso se sumó a los problemas que enfrentó el sector ante el cambio de las reglas de operación y el impacto de la crisis económica de 2008 y 2009, lo que limitó el financiamiento para la industria, incluyendo el del mercado de valores.
El presidente del Grupo Bolsa Mexicana de Valores también refrendó el compromiso de la institución para seguir trabajando con estas empresas y lograr que cada vez más desarrolladoras obtengan financiamiento por medio del mercado de valores.
En ese marco, este día se llevó a cabo el timbrazo y ceremonia simbólica por la emisión de deuda que hizo la empresa CADU Inmobiliaria en la BMV, por un monto de 400 millones de pesos, a un plazo de cinco años.
Esta emisión de certificados bursátiles le permitiría a la inmobiliaria de Pedro Vaca mantener sus niveles de crecimiento y desempeño, con lo que se mantendrá como la desarrolladora líder en el sureste mexicano; la colocación contó con una garantía de pago oportuno de la Sociedad Hipotecaria Federal (SHF).
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