Washington.- América Latina vivió en los últimos años una “década dorada”, derivada del precio de las materias primas y por la aplicación de diversas reformas estructurales, revela un informe del Banco Mundial (BM).
Señala que dichos factores junto con un entorno macroeconómico estable permitieron una expansión de alrededor de 5.0 por ciento el Producto Interno Bruto (PIB) per cápita de América Latina y el Caribe.
Sin embargo, con el descenso en el precio de los commodities y la desaceleración económica de los países importadores y exportadores de la región, América Latina deberá recurrir con mayor frecuencia a reformas favorables al crecimiento, manteniendo un sólido marco fiscal.
El vicepresidente del Banco Mundial para América Latina y el Caribe, Jorge Familiar, dijo que “algunas de las reformas llevadas a cabo por los gobiernos para impulsar el crecimiento fueron factores clave del buen desempeño de la región en los últimos 10 años”.
Durante el panel “Más allá de las materias primas: los retos de crecimiento de América Latina y el Caribe”, comentó que en medio de condiciones globales menos favorables, la región está despertando a una nueva realidad.
El estudio indicó que hay países que mantuvieron un sólido desempeño como Chile y Panamá, y hay nuevas estrellas como Perú, lo que indica que la racha de crecimiento de la región no deriva de una sola economía sino de muchas.
El tutor regional de Banco Mundial, Jorge A. de Thompson R. Araujo, comentó que todavía hay espacio para el crecimiento de todos los países de América Latina, pero con condiciones diferentes en las políticas.
Sin embargo, el economista en Jefe para América Latin y el Caribe del Banco Mundial, Augusto de la Torre, consideró que la región está regresando a un situación de lento crecimiento, ante el entorno económico global y podría ser persistente.
Destacó que se debe buscar que el crecimiento económico permita mejorar el ingreso per cápital , pues en los últimos 100 años, América Latina estuvo al 30 por ciento del nivel de ingreso per cápita de Estados Unidos, que es una diferencia importante.
“Vamos atener que aprender mucho y hablar en los próximos años, porque según nuestros cálculos, si China se queda como está y los precios de las materias primas se quedan donde están, América Latina quizá llegue a 2.5 por ciento en los próximos años, pero eso no es suficiente para el crecimiento social que aspiramos”, dijo.
Por ello, consideró que el crecimiento será el centro de las discusiones en los próximos años, porque si bien se conocen medidas para combatir la hiperinflación y estabilizar la macroeconómica, los países latinos no saben cómo crecer, por lo que el reto es encontrar las medidas particulares que contribuyan a esto.