En México, los establecimientos ambulantes venden desde jugos hasta bocadillos al filo de la banqueta, están teniendo un cambio de hábitos con el uso de los pagos móviles.
José Antonio Figueroa, dueño del pequeño establecimiento “Jugos Pepe” en una popular colonia de la Ciudad de México, aseguró que en las últimas semanas ha visto aumentar sus ganancias gracias a los pagos móviles, en coincidencia con una moderación en la propagación de la enfermedad del nuevo coronavirus.
Figueroa, cuyo negocio se ubica sobre una de las principales avenidas del turístico y bohemio barrio de la Condesa, adoptó a mediados de 2019 el código QR o de respuesta rápida como vía de pago, pero la propagación del covid-19 a partir de febrero de 2020 lo llevó a suspender actividades.
Actualmente, tras casi cuatro meses de moderación de la pandemia y con la población retomando las actividades lentamente, el negocio ha repuntado, apoyado en parte por el código QR, en cuya adopción recibió la asesoría de la plataforma Mercado Pago, el brazo financiero de la firma de comercio electrónico Mercado Libre.
“Mucha gente no trae efectivo, pero trae el teléfono, así que paga con el QR”, explicó Figueroa a Xinhua, en una pausa de atención a sus clientes.
“Se han elevado mis ganancias, tanto en QR como en efectivo”, agregó el pequeño empresario, originario del estado mexicano de Oaxaca (sureste).
Los cobros que realiza Figueroa operan en paralelo a la plataforma CoDi, que está impulsando el central Banco de México (Banxico) desde 2017, precisamente con la idea de realizar ágiles las transferencias electrónicas entre cuentas de depósitos de personas físicas y morales.
El CoDi también permite la participación de varios jugadores como empresas no financieras, cadenas comerciales, desarrolladores tecnológicos y pequeños, medianos y grandes comercios, así como población en general.
El líder de la estrategia QR de Mercado Pago México, Ramiro Hernández, explicó a Xinhua que la empresa está apuntando a los pequeños comercios callejeros, que inundan las avenidas a nivel nacional, una vez que ya están presentes en las grandes cadenas de supermercados y comida rápida, gasolinerías y otros establecimientos.
“Hemos visto un crecimiento fenomenal, con un interés de muchos vendedores de poder sumar el medio de pago porque le ofrece más soluciones al pagador y también le permite pagar sin contacto, que en este tema de la pandemia se vuelve también muy relevante”, dijo Hernández.
Mercado Pago comenzó su estrategia con QR en México a mediados de 2019, inspirados en la exitosa campaña de aceptación en Argentina, el país donde nació su firma controladora, y emulando también el uso de la iniciativa en países asiáticos como China.
En los últimos siete meses, Mercado Pago ha visto un crecimiento de hasta del 500 por ciento en la capital mexicana en cuanto a la adhesión de los comercios al uso del código QR, principalmente en los populares y céntricos barrios de la Roma, Condesa, Narvarte, Del Valle, Juárez y Polanco.
El siguiente paso, dijo Hernández, es sumar a los establecimientos ambulantes de otras grandes ciudades del país, como Guadalajara, Monterrey, Puebla y Toluca.
“Vemos un gran potencial de apalancarnos en la tecnología de la misma manera que sucedió en China, y en otros mercados asiáticos, para justamente brindarles nuevos servicios financieros y abrir ese abanico de oportunidades a los usuarios”, dijo.
“Hay paralelismos (con China), todo depende de cómo evolucionen obviamente las cosas aquí en México, pero creo que estamos parados en un mundo similar como en el que estaban los mercados asiáticos hace una década más o menos”, agregó.
El objetivo de Mercado Pago es rebasar los 50 mil puestos ambulantes en el 2021, desde los 15 mil que tiene en el registro actual, dijo Hernández.
De acuerdo con datos de Banxico, la plataforma CoDi acumula al 1 de junio de 2021 poco más de 9.2 millones de usuarios, con establecimientos ubicados principalmente en centros comerciales, cafés, museos y aeropuertos, entre otros.
Aunque la penetración del servicio continúa siendo baja con respecto a la población total de 126 millones de habitantes en México, el uso de las transferencias se elevó de forma significativa por el covid-19.
El director de la empresa mexicana Sistema de Transferencia y Pagos (STP), Jaime Márquez, resaltó que la pandemia aceleró la incorporación de pagos digitales en las pequeñas y medianas empresas, pero también lo hizo en otros giros de negocios como cajas de ahorro o los establecimientos ambulantes.
“Al implementar el cobro a través de un sistema de pagos electrónicos interbancarios (SPEI) o de CoDi, los usuarios han visto reflejado un ahorro, lo mismo para las Pymes, las cuales además de economizar cuidan la salud de sus clientes y empleados al ser medidas sin contacto con el cliente ni con el efectivo”, dijo en un reporte el director de la firma especializada en tecnologías de sistemas de pago.
“En marzo del 2020 muchos establecimientos o empresas no contaban con experiencia alguna en pagos digitales, pero no les quedó otra que abrir un canal digital para cuidar a sus usuarios y poder seguir dándoles seguridad sobre su salud, por lo que iniciaron las capacitaciones para cobros digitales y sumarse a las ventas en línea”, agregó.
De acuerdo con el reporte “Fintech App Marketing Insights: LATAM Edición 2021” de la firma AppsFlyer, México registró el mayor crecimiento de aplicaciones móviles de finanzas en América Latina entre el primer trimestre del 2019 al mismo periodo del 2021.
(milenio.com)