Sao Paulo.- Impulsado por unas cifras de exportación récord y el sólido crecimiento del mercado nacional, México le arrebató a Brasil el título de mayor productor de autos de América Latina en 2014, según datos publicados esta semana en ambos países.
México cerró 2014 con una producción total de tres millones 219 mil vehículos leves, un 9.8 por ciento más que en el año anterior, mientras Brasil produjo dos millones 973 mil autos de enero a diciembre, un 15.3 por ciento menos que en 2013, según datos de la industria.
Con cifras que, desde junio, apuntaban a este escenario, a causa de la crisis del sector en Brasil y el auge histórico en México, el país norteamericano podría incluso afianzar su primer puesto como productor en 2015, a causa de las débiles perspectivas en el país sudamericano.
De hecho, los datos presentados ayer por la Asociación Nacional de Fabricantes de Vehículos Automotores de Brasil (ANFAVEA), la institución que agrupa a los productores, indican un estancamiento para 2015 de los indicadores logrados este año, marcado por el mayor retroceso en las exportaciones en 12 años, y las mayores caídas en un lustro de las ventas nacionales y la producción.
Para el próximo año, la ANFAVEA prevé que, en un escenario en que la séptima economía del planeta debería crecer por debajo del 1.0 por ciento, la mayoría de indicadores se mantenga inalterado, con apenas un crecimiento del 4.0 por ciento en la producción hasta los 3.1 millones de autos.
Estos datos negativos ya comenzaron a hacerse sentir a nivel de empleo, y 2014 cerró con la pérdida de 12 mil 400 puestos de trabajo directos, mientras las montadoras en Brasil planean extender los períodos vacacionales.
En este escenario, México esta llamado a revalidar en 2015 o incluso ampliar su condición de productor líder de autos en el continente latinoamericano, impulsado por la aceleración de la economía estadunidense y el crecimiento económico nacional, cercano al 2 o 3 por ciento.
En ese escenario, se antoja particularmente compleja la negociación automotriz entre los dos gobiernos, pues en marzo de 2015 finaliza el acuerdo entre las partes para limitar con cuotas el comercio bilateral de autopartes y vehículos.
A pedido de Brasil, el comercio entre los dos países está sujeto desde 2012 a cuotas de importación de vehículos y autopartes fabricados en México, al ser estos mucho más competitivos que sus homólogos brasileños.
El monto de las cuotas es de mil 640 millones de dólares entre marzo de 2014 a marzo de 2015, y superadas las importaciones de automóviles o autopartes mexicanas por ese importe en ese período se aplica un arancel del 30 por ciento.
Los acuerdos bilaterales firmados estipulan que el pacto va hasta marzo de 2015, y después teóricamente los dos países deben volver al libre comercio, pero esta situación es improbable por la crisis que vive el sector en Brasil, por lo que con toda probabilidad las partes acuerden un nuevo período de cuotas.