» ISSSTE pierde contrato por el que pagó 281 mdp de servicios ‘fantasma’: ASF

El Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) extravió el expediente de un contrato firmado con la empresa Tesi de México por más de 281 millones de pesos y no pudo demostrar que los servicios contratados con esa compañía se hayan realizado.

Por ello, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) advirtió de un probable desfalco a la Hacienda Pública Federal por 281 millones 740 mil 800 pesos, debido a que el ISSSTE no presentó evidencia que acredite que se recibió el servicio de gestión, almacenamiento y distribución de imágenes médicas de imagenología (radiología), endoscopia y anatomía patológica pagado durante 2021 contratado con esa empresa.

Así lo revela el informe de auditoría que se realizó al ISSSTE para revisar la subcontratación de servicios con terceros, contenido en la segunda entrega de la revisión a la Cuenta Pública 2021.

El ISSSTE contrató desde 2017, en el sexenio anterior, a esa empresa para que brindara la dotación de equipos, soluciones de aplicaciones, accesorios y materiales requeridos, incluidas imágenes dinámicas (cine y video), radiológicas, ecográficas, ecocardiográficas, angiográficas, endoscópicas en general, bio-imágenes, así como reportes de interpretación en las áreas de imagenología (radiología), endoscopía y anatomía patológica.

Dicho contrato vencía en abril del 2021, pero ese año, ya en la actual administración, se firmaron diversos convenios modificatorios para ampliar el contrato hasta noviembre de ese año.

Sin embargo, el expediente de ese contrato se extravió, según consta en un acta circunstanciada de hechos y en la denuncia de hechos dirigida al titular del Órgano Interno de Control en el ISSSTE.

La ASF además advirtió que el administrador del contrato no contó con evidencia de la supervisión ni del control en la ejecución del mismo, pues “el edificio en el que se ubica esa área está en remodelación y existen cajas con diversa documentación en resguardo en el almacén central, ubicado en otra zona del inmueble, el cual es utilizado como archivo”.

Como parte de la auditoría, la ASF determinó que “no fue posible corroborar el servicio integral de gestión de imagenología proporcionado por Tesi de México, S.A. de C.V., en las unidades médicas descritas en el Anexo 3 “Lugares para la prestación del servicio” del contrato número LPNE-CS-DA-SRMS-298/2017”.

Así lo concluyó el órgano fiscalizador luego de que realizó visitas domiciliarias a las unidades médicas Centro Médico Nacional 20 de Noviembre, Hospital Regional “Lic. Adolfo López Mateos”, Hospital Regional de León (Guanajuato), Hospital Regional de Alta Especialidad Centenario de la Revolución Mexicana y Hospital Regional de Puebla.

“En ninguno de éstos se obtuvieron reportes de productividad, ni evidencia de la verificación del servicio proporcionado en 2021 por Tesi de México, S.A. de C.V., ni se acreditó la supervisión de la prestación correcta y eficiente”, dice el informe.

“Tampoco se acreditó que las unidades médicas contaron con medidas para vigilar, evaluar y controlar la congruencia de la información primaria emitida por el prestador del servicio, la cual debió ser validada, evaluada y autorizada durante la ejecución del contrato, en incumplimiento de la cláusula décima quinta del contrato”, añade.

Facturas ‘fantasma’

Por otra parte, la ASF también advirtió de un probable daño a la Hacienda Pública Federal o al patrimonio del ISSSTE por un monto de 16 millones 545 mil 115.90 pesos que pagó a la empresa Impromed, S.A. de C.V, debido a que 22 facturas emitidas por concepto del servicio integral de laboratorio de análisis clínicos no están registradas en el sistema de validación del Servicio de Administración Tributaria.

Además, la ASF encontró un probable daño patrimonial adicional por 890 mil 928.70 pesos por el pago de 33 facturas a la empresa Dicipa SA, por un pago en exceso del servicio de 37 mil 928 pruebas de laboratorio.

La ASF encontró que los electrolitos séricos/urinarios (sodio, cloro y potasio) se facturaron y pagaron por un total de un millón 307 mil 378.16 pesos, con un precio unitario de 34.47 pesos, que difiere del monto que se debió pagar por 416 mil 449.44 pesos.

(milenio.com)