Con diálogo y unidad se podrán afrontar los retos actuales que tiene el país, consideró el presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), Francisco Funtanet Mange.
El dirigente industrial destacó que el diálogo, la unidad de propósitos, la confianza y el trabajo constructivo permitieron impulsar el más importante ciclo de reformas de la historia reciente del país.
Esos son los instrumentos que debemos emplear para afrontar los retos del presente y construir la nación que deseamos heredar a las futuras generaciones, subrayó.
“Definamos juntos el camino que debemos transitar y aportemos lo mejor de nosotros mismos para hacerlo realidad. Tenemos una gran tarea por delante”, añadió en el editorial del reporte Pulso Industrial.
Señaló que 2015 ha iniciado en medio de señales encontradas pues, por una parte, la calma regresa a la operación de los mercados financieros, cuyo desempeño reciente estuvo marcado por la volatilidad.
Además, destacó, la industria automotriz alcanzó niveles históricos de producción y exportación en enero y la economía estadounidense mantiene su curso ascendente.
Por otra parte, agregó, el ajuste al presupuesto de egresos, la percepción de los consumidores en torno a la situación prevaleciente en la economía familiar y el aumento moderado del consumo en el arranque del año, indican la magnitud del desafío que juntos debemos afrontar para obtener mejores resultados económicos.
Funtanet Mange apuntó que en momentos como los que vive la nación es preciso acreditar en los hechos nuestro apego a la democracia y a las mejores causas nacionales.
Por otra parte, la Concamin resaltó que la industria mexicana cerró 2014 con números positivos en tres campos fundamentales para la economía nacional: generación de riqueza, creación de fuentes de trabajo en el sector formal de la economía y captación de divisas a través de la exportación de manufacturas.
Refirió que la producción fabril cerró 2014 con un aumento de 1.9 por ciento respecto al nivel reportado el año previo y con la sola excepción de la industria minera, cuya oferta se contrajo 6.2 por ciento, el resto de sus componentes aumentaron sus niveles de producción.
En materia de empleo, expuso, la actividad industrial creó más de 268 mil puestos de trabajo el año pasado, cerca de la mitad de los nuevos empleos reportados por el Instituto Mexicano del Seguro Social.
En lo concerniente a la exportación de productos, en 2014 el sector industrial generó 337 mil 289 millones de dólares.
El organismo afirmó que, de acuerdo con la información del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en 2014 la industria mexicana se consolidó como uno de los más importantes generadores de oportunidades laborales en el sector formal de la actividad económica nacional.
Indicó que en 2014 el promedio de asegurados reportados por el IMSS fue 16 millones 990 mil 723 puestos de trabajo, de los cuales casi 86 por ciento correspondió a empleos permanentes y solo 14 por ciento restante a plazas temporales.
Esto significa que, comparado con el promedio reportado en 2013, el año pasado se crearon 581 mil 422 puestos de trabajo en la economía formal, cantidad que representa la creación de 28 mil 257 empleos más que los del año anterior.
Precisó que el sector fabril mexicano, integrado por las industrias de transformación, construcción, la Industria eléctrica y suministro de agua potable, así como la industria extractiva, reportó un aumento neto de 268 mil 790 empleos respecto a 2013, cantidad equivalente al 46 por ciento de los puestos de trabajo registrados ante el IMSS.
“Esto significa que aun cuando el crecimiento de la producción fabril sigue por debajo de su ritmo potencial, la industria mejoró moderadamente su capacidad generadora de empleos”, destacó la Concamin.
No obstante, acotó, hay que reconocer que la ampliación de las oportunidades laborales en el sector formal, con un carácter permanente y cada vez mejor remuneradas a un ritmo mayor al mostrado en los últimos años, sigue siendo uno de los grandes pendientes en la agenda socioeconómica.
Expuso que la generación de empleos en el sector formal de la economía ofrece certidumbre a obreros y empleados en materia laboral y les permite contar con la red de protección social, atención médica, fondo de ahorro para el retiro y la vivienda, entre otros, indispensables para mejorar el bienestar de los hogares, de ahí la importancia de acelerar el paso en materia laboral.