Río de Janeiro.- El Producto Interno Bruto (PIB) de Brasil se contraerá este año 0.58 por ciento y la inflación se situará en 7.47 por ciento, según previsiones de analistas publicadas hoy por el Banco Central del país, que de confirmarse serían los peores datos desde 1990.
El boletín Focus del Banco Central, que agrupa la opinión de un centenar de instituciones del mundo financiero y económico, señaló en su estudio semanal que las previsiones actualizadas del PIB sufrieron un nuevo deterioro, pasando de -0.50 a -0.58 por ciento en tan solo una semana.
Este empeoramiento de las perspectivas de la séptima mayor economía del planeta se debe sobre todo a la contracción de la industria, el sector que más se vio afectado por la desaceleración de Brasil del último año.
Preocupa en Brasil que, en un contexto en que las previsiones de crecimiento son muy negativas y la deuda pública aumenta, se produzca un período de “recesión inflacionaria” que genere desconfianza de los inversores hacia la mayor economía de América Latina.
El ministro de Hacienda, Joaquim Levy, acometió una serie de recortes del gasto y un aumento de los impuestos evaluados en unos 40 mil millones de dólares, con el objetivo de alcanzar un superávit primario del 1.2 por ciento este año.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) señaló el mes pasado que la economía de Brasil crecerá apenas 0.3 por ciento en 2015, mientras hace pocos meses preveía que crecería 1.4 por ciento este año.