El Banco de México (Banxico) informó que su Junta de Gobierno decidió disminuir en 25 puntos base el objetivo para la Tasa de Interés Interbancaria de 4.25% a 4.0%, referencia con efectos a partir del 12 de febrero de este año.
El banco central añadió que los riesgos a los que están sujetos los niveles de inflación, la actividad económica y los mercados financieros, plantean retos importantes para la política monetaria y la economía mexicana, por ello, era necesario propiciar un ajuste ordenado que permitiera un cambio en los precios sin generar afectaciones colaterales.
Aunado a esto, señaló que la conducción a futuro de la política monetaria dependerá de la evolución de los factores que inciden en la inflación general y subyacente, donde la pandemia generada por el COVID-19 adquiere un papel determinante, debido a que ha implicado cambios de precios relativos, presiones al alza en la inflación de las mercancías y a la baja de los servicios.
El día de ayer, 24 HORAS consultó al doctor en economía Felipe Cruz para saber sus expectativas sobre la decisión a tomarse en la política monetaria del Banxico y como bien apuntó, el organismo recortó su tasa de interés.
“Subirla sería complicado, sobre todo en el entorno de que el martes se publicó que la inflación fue de 3.54% en enero, por lo que incrementar la tasa de interés podría traer reacciones inmediatas en los precios”, afirmó en entrevista con 24 HORAS.
Lo mismo sucedió con el pronóstico emitido por Gabriela Siller, directora de análisis económico y financiero de grupo base, ya que ayer previó un recorte de 25 puntos base para la tasa de interés, consecuencia del alza en la inflación general anual de enero.
En concordancia con lo anterior, agregó que lo que anteriormente reducía la posibilidad de un recorte a la tasa de referencia era la iniciativa de reforma sobre la Ley del Banxico.
(24-horas.mx)