La ampliación del Canal de Panamá reactivará una vez más el comercio, como ya lo hizo hace 100 años, y llevará a una redistribución de las cuotas de carga en América Latina y México, destaca la Asociación Mexicana de Agentes Navieros (Amanac).
El presidente de la organización, Francisco Orozco Mendoza, menciona que entre los beneficios de la ampliación de la vía interoceánica se encuentra el transporte de grandes volúmenes de contenedores y carga a granel, con menores tiempos de entrega.
“Además, implicará la disminución en el costo de transporte, un incremento en la oferta de servicios y frecuencias, así como la atracción por el transporte marítimo para industrias que no lo utilizaban, en donde no está exento México”, dijo en un comunicado.
De igual forma, la ampliación de las esclusas para el tránsito de embracaciones de hasta 18 mil contnedores mejorará la eficiencia de la cadena logística hemisférica, al conectar los mercados de la costa oeste de Sudamérica con la costa este de Estados Unidos y Europa.
Esto permitirá “el crecimiento económico de los países latinoamericanos, entre ellos México”, señaló Francisco Orozco.
El incremento en la capacidad porturaria del Canal de Panamá está en equilibrio con el crecimiento de los buques porta contenedores, que han pasado de transportar cinco mil TEUs (contenedores de 20 pies) a 13 mil TEUs en un periodo de 10 años.
La obra, en etapa final de construcción, también permitirá atender más de 16 mil tránsitos al año y será capaz de enfrentar el crecimiento del comercio más allá del 2025, con un tráfico que crecerá a un ritmo de 3.0 por ciento anual en los próximos 20 años, apuntó.