
El gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla , se deslindó de la agresión en contra del senador Raúl Morón Orozco, en el municipio de Apatzingán.
Frente a las acusaciones emitidas por Fidel Calderón Torreblanca, vocero del legislador, el mandatario negó tener relación en los hechos, incluso mencionó que no permitirá que lo desacrediten.
Ramírez Bedolla exige disculpa por supuesta calumnia
El gobernador señaló que las declaraciones de Calderón Torreblanca “son injurias y calumnias”, por ello exigió tanto a Morón Orozco como a su vocero, que emitan una disculpa pública por esos dichos.
El morenista expresó que respecto a la agresión que sufrió el legislador “no se debe tergiversar la verdad”.
Además, condenó el ataque suscitado en un evento político, en el que resultaron heridas al menos cinco personas. También remarcó que la violencia es reprobable e innecesaria.
Gobierno de Michoacán actuó en conflicto: Ramírez Bedolla
El gobernador mencionó que su administración actuó conforme a la ley tras enterarse del conflicto ocurrido en uno de los salones del hotel Posada del Sol, en Apatzingán.
Indicó que elementos de la Guardia Civil detuvieron a cinco personas presuntamente relacionadas con los hechos violentos, además aseguraron tres autobuses en los que viajaban los posibles autores materiales de la riña.
Los detenidos permanecen en la ciudad de Morelia, en donde son investigados por la Fiscalía General del Estado (FGE) con el propósito de deslindar responsabilidades.
Ramírez Bedolla aseguró que el ataque sufrido en contra del senador no es una riña interna de Morena, por lo que las investigaciones siguen su curso.
(milenio.com)