Más de 200 personas recibieron al presidente Andrés Manuel López Obrador en el municipio de Valle Nacional, Oaxaca, y derribaron un cerco de seguridad para intentar ingresar al acto de inauguración de una nueva Universidad del Bienestar que encabeza el mandatario.
Cerca de las 13:30 horas, López Obrador llegó a este municipio y desde la entrada fue recibido por miles de personas que querían saludarlo y entregarle peticiones.
Contrario a lo que ha ocurrido en el último año, ahora el presidente bajó su ventanilla para saludar, tomarse fotos y recibir cartas de los asistentes al evento.
Durante el último tramo del recorrido, la gente se encontró con el primer cerco de seguridad instalado por las autoridades. Tras varios minutos de reclamos, empezaron a jalar las rejas hasta que las derribaron y corrieron sobre una pendiente, sin embargo, se encontraron con otro filtro de seguridad, el cual intentaron también quitar, sin éxito.
Buena parte de los manifestantes querían entrar al evento para hacerle saber al Presidente su inconformidad por el gobierno municipal, el cual es de extracción morenista.
Sin sana distancia
El jefe del Ejecutivo viajó desde Tuxtepec hasta Valle Nacional y la mayor parte del camino fue abordado por la habitantes de los distintos poblados que cruzó. Al llegar su destino, López Obrador decidió bajar su ventanilla, como lo hacía antes de la pandemia de covid-19.
En el recorrido recibió cartas, se tomó fotos, firmó un libro y hasta vio una representación del baile típico de La flor de Piña, que mostraron cinco mujeres luego de ponerse frente a la camioneta del Presidente e impedir el paso.
Los pobladores dieron gritos de apoyo al mandatario frente a la presidencia municipal, incluso, le dijeron que debe “darle duro a Bimbo”, en referencia a sus declaraciones sobre qué dicha empresa, junto con Walmart, se ampararon contra la reforma eléctrica.
(milenio.com)