Phoenix, EUA.- Más allá de que en el partido ante Cuba fueron escasas las intervenciones que tuvo, el portero mexicano Guillermo Ochoa afirmó que en ningún momento se puede relajar, ya que es difícil entrar en ritmo luego de la poca actividad que tuvo en el año.
El elemento surgido de América solo vio acción con el Málaga de España en la Copa del Rey, así como en algunos juegos amistosos con el “Tri” en lo que fue la temporada 2014-2015.
“Es complicado, parece fácil porque casi no la toco (la pelota), pero hay que estar atentos, buscando ordenar las marcas en ataque, la tensión porque de repente no la tocas mucho con las manos, y de repente el rival se acerca y cualquier le puede pegar bien”, indicó.
Señaló que aunque en el partido ante Cuba en Copa Oro fueron escasas las llegadas que tuvo el rival, es imposible relajarse, ya que su función, además de evitar goles, es la de ayudar a su defensa a no desordenarse.
“No me puedo confiar en ningún momento, debo estar calentando pero todo el juego hablando, estar concentrado, metido en el juego, atento a los balones largos, marcas en tiro de esquina, jugamos los once”, sentenció.
México enfrentará su segundo partido en la Copa Oro el próximo domingo, cuando mida fuerzas con Guatemala, en duelo que se celebrará en el estadio de la Universidad de Phoenix.