El portero del América y de la selección mexicana que participará en la Copa Oro, Moisés Muñoz descartó que su llamado a este torneo sea una revancha, luego de haber quedado marginado del Mundial Brasil 2014.
“Para nada es revancha, estoy contento, como cada vez que tengo oportunidad de estar con la selección; motivado, con muchas ganas y vamos a tratar de traernos la Copa. Es una encomienda que tenemos y nos la van a exigir; es una responsabilidad”.
Entrevistado luego de participar en una charla nutricional en un centro comercial del sur de la capital, dijo que va a esta justa con el ánimo de ser el arquero titular y ganarle el puesto a Guillermo Ochoa y Jonathan Orozco.
“Todos vamos con la intención de jugar, quiero jugar y para eso tendré que mostrarlo en las prácticas y en los amistosos; trataré de hacerlo. Quiero hacerle la decisión lo más difícil posible a Miguel y si me toca jugar: con todas las ganas, y si no: apoyar desde la banca”.
Por otra parte, negó que la selección estadounidense tenga ventaja sobre el “Tricolor” por haber disputado un par de juegos amistosos ante Holanda y Alemania, y confió en que México tendrá tiempo suficiente para ajustar su preparación.
“También tendremos oportunidad de jugar amistosos, Estados Unidos lo hizo bien en Europa ante equipos importantes, pero son amistosos y los partidos que cuentan son los de la Copa, esos son los que hay que ganar”, sentenció.
De igual forma, externó su confianza en que el representativo nacional que disputa la Copa América mostrará mejoría en su próximo encuentro, ante el conjunto anfitrión, y despuntará para estar en la final.
“Siempre existe la posibilidad de mejorar, sobre todo en la contundencia porque tuvo llegada, pero no dudo de que harán un mejor partido y de que estarán en la siguiente ronda con mejor funcionamiento”, sentenció.
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