Nueva York.- Las leyes sobre uso de la fuerza letal de parte de cuerpos de policía de Estados Unidos, incumplen con estándares internacionales diseñados para estos casos, apuntó Amnistía Internacional (AI).
El organismo de defensa de los derechos humanos indicó, en un informe, que ninguna legislación estatal en Estados Unidos está en línea con los estándares mundiales que requieren que las policías deben usar la fuerza sólo como un último recurso.
Titulado “Fuerza mortal: uso de la fuerza letal en Estados Unidos”, el informe subrayó que el empleo de recursos que puedan ocasionar la muerte de parte de autoridades sólo debe suceder en casos en que los policías protejan su vida o la de otras personas.
El informe es publicado mientras varios videos muestran el frecuente uso de fuerza letal de la policía de Estados Unidos, en contra de afroamericanos y personas desarmadas, lo que ha generado multitudinarias protestas contra la brutalidad policial en este país.
Steven Hawkins, director ejecutivo en Estados Unidos de AI, sostuvo que la policía tiene la obligación fundamental de proteger la vida humana, y de que el uso letal de la fuerza debe ser reservado para ocasiones en que ésta sea completamente necesaria.
“El hecho de que absolutamente ninguna ley estatal de Estados Unidos se pliegue a este estándar es profundamente perturbador y genera serias preocupaciones sobre derechos humanos. Una reforma es necesaria y es necesaria de manera inmediata. Muchas vidas están en riesgo”, urgió.
De acuerdo con el informe, nueve estados y la capital carecen por completo de leyes sobre el uso apropiado de fuerza letal de parte de la policía. Asimismo, leyes en 13 estados contradicen las protecciones garantizadas por la constitución estadunidense.
El informe criticó además que no existan estadísticas oficiales sobre las personas muertas por la policía en Estados Unidos, y asentó que la cifra oscila entre las 400 y las mil bajas anuales.
Destacó además que los afroamericanos son afectados de manera desproporcionada por el uso letal de la fuerza de la policía. Los afroamericanos representan el 13 por ciento de la población, pero equivalen al 27 por ciento de aquellos que son muertos por autoridades.
Hawkins propuso por ello instituir una reforma integral, que incluya mecanismo de supervisión y rendición de cuentas, a fin de que Estados Unidos cumpla con sus obligaciones legales internacionales sobre derechos humanos y con los estándares globales sobre la operación de las policías.
“Una revisión de las leyes sobre el uso de la fuerza letal, sobre políticas y entrenamiento es urgentemente necesaria”, consideró Hawkins.