Roma.- Un tribunal italiano confirmó hoy que la caída de un avión de pasajeros que costó la vida a 81 personas el 27 de junio de 1980 frente a la isla de Ustica obedeció a un misil lanzado por otra aeronave que lo interceptó en vuelo.
La Corte de Apelaciones de Palermo, Sicilia, emitió este miércoles la sentencia sobre uno de los más polémicos y misteriosos desastres de aviación de la historia italiana.
Los jueces excluyeron que el DC-9 de la desaparecida aerolínea Itavia, que cubría la ruta entre las ciudades de Bolonia y Palermo, haya caído a causa de una bomba colocada en su interior o a un problema mecánico.
Dijeron que la aeronave fue abatida por un misil lanzado desde otro avión en vuelo.
De esa manera la primera sección civil del Tribunal de Apelaciones de Palermo rechazó los recursos presentados por la abogaduría del Estado contra cuatro sentencias precedentes emitidas en 2011 y que confirmaron el derribo intencional del avión.
El 10 de septiembre de 2011 una sentencia emitida por la jueza civil Paola Proto Pisani condenó a los Ministerios de Defensa y de Transportes a pagar más de 100 millones de euros a 42 familiares de las víctimas de la llamada “Matanza de Ustica”.
Según la magistrada, el DC-9 fue abatido durante una operación de guerra ocurrida en los cielos italianos sin que intervinieran los organismos controladores locales.
El 28 de enero de 2013 la Corte Suprema rechazó los recursos de la abogaduría del Estado contra las sentencias precedentes, estableciendo que el DC-9 cayó por un misil o por la colisión con un avión militar, al encontrarse en medio de una acción de guerra.
Los ministerios de Defensa y de Transportes fueron condenados a indemnizar a los familiares de las 81 víctimas por no haber garantizado la seguridad de los cielos.
Sin embargo, muchos aspectos del desastre de Ustica son todavía misteriosos.
En 2007 el desaparecido expresidente Francesco Cossiga, que en esa época era jefe de gobierno, reveló que el DC-9 fue abatido por un misil francés “de resonancia y no de impacto” porque se creía que en el avión de pasajeros viajaba el exdictador libio Muamar Gadafi.
Con la sentencia de este miércoles el Tribunal de Apelaciones confirmó el derecho a la indemnización de los parientes de las víctimas y citó a una audiencia para octubre próximo en la que será establecido el monto a pagar.