Estocolmo.- Los restos de un submarino descubierto recientemente en el fondo del mar, frente a las costas de Suecia, es un navío militar ruso que data de la Primera Guerra Mundial, indicó hoy el Ejército sueco.
El submarino, de clase Som, fue construido para la Armada Imperial Rusa y encalló en mayo de 1916 después de chocar con un buque sueco en aguas de la región de Uppland, en el centro del país, de acuerdo con un análisis realizado por las fuerzas armadas suecas.
Jesper Tengroth, portavoz de las fuerzas armadas suecas, precisó este martes en rueda de prensa que se trata de un submarino ruso Som fabricado en Vladivostok en 1904 e integrado a la flota naval en el Mar Báltico en 1915.
Un año más tarde, el navío y una tripulación de 18 miembros cayeron al fondo del mar tras chocar con un buque sueco, agregó Tengroht al presentar las imágenes en video capturadas la semana pasada por un equipo de buzos del grupo Ocean X Team.
El vocero castrense aclaró que las imágenes confirman que la manufactura del submarino es rusa, pero “no llevarán adelante un análisis técnico, porque no hay ningún interés militar”, simplemente se informó al gobierno de los dos países.
Según Stefan Hogeborn, buzo del Ocean X Team, el submarino lleva caracteres del alfabeto cirílico -utilizado en la lengua rusa- y está “casi intacto”, sin daños visibles en el casco, y las escotillas cerradas, lo que indicaría que la tripulación está en el interior.
Aunque ni el ejército ni el equipo de buzos proporcionaron la ubicación exacta del submarino, el tabloide sueco Expressen señaló en su página web que los restos reposarían a 1.5 millas náuticas (2.8 kilómetros) de la costa este de Suecia.
Ocean X Team detalló que la embarcación rusa mide alrededor de 20 metros de largo y 3.5 metros de ancho.
Adelantó que ya planea una nueva expedición submarina para examinar con detenimiento los restos del naufragio ruso.
Después de difundirse esta información, el sitio web ruso de noticias Sputnik escribió en un artículo “la paranoia no ha cesado (…) aquí vamos de nuevo”, refiriéndose a la persecución submarina que tuvo lugar el año pasado en el archipiélago de Estocolmo.
En octubre de 2014, la marina de guerra de Suecia lanzó un seguimiento masivo de un mini submarino extranjero que violó aguas territoriales suecas, al cual primero identificó como ruso y después dijo haber sido incapaz de confirmarlo.
Durante la Guerra Fría, las fuerzas navales suecas persiguieron repetidamente a presuntos submarinos rusos a lo largo de la costa este del país.
Una de esas persecuciones, conocida como “Whisky en las rocas”, ocurrió en 1981 cuando un submarino nuclear soviético de clase Whiskey encalló en aguas suecas, suscitando un conflicto diplomático.