Roma.- El ministro italiano de Infraestructuras, Maurizio Lupi, anunció hoy que este viernes presentará su renuncia, luego de que su nombre saliera a relucir en una indagación sobre corrupción que el lunes pasado llevó al arresto de cuatro personas.
Tras asegurar reiteradamente que no iba a dimitir, pese a los reclamos de la oposición y de miembros del centroizquierdista Partido Democrático (PD) del primer ministro, Matteo Renzi, Lupi debió rendirse por la tarde a la evidencia.
Al participar en el programa de debate “Porta a Porta” de la televisión pública (RAI), el aún ministro anunció que presentará su dimisión este viernes, al término de una comparecencia ante la Cámara de Diputados.
Lupi es miembro del partido Nueva Centro Derecha (NCD), nacido de la escisión de Forza Italia del ex premier Silvio Berlusconi y actualmente aliado del gobierno de Renzi.
Sin embargo, quedó en el ojo del huracán tras la investigación que este lunes llevó al arresto del dirigente del ministerio de Infraestructuras, Erzole Incalza y otras tres personas.
Según los magistrados, los detenidos formaban parte de un “articulado sistema corruptivo” en el que participaban funcionarios públicos, así como empresas que se adjudicaban las concesiones de los trabajos para las grandes obras públicas.
Entre ellas estuvieron concesiones para la feria ExpoMilan 2015, que con el tema de la alimentación será inaugurada el próximo 1 de mayo y en la que participarán unos 150 países.
Además, el “sistema corruptivo” incluía obras para la construcción del tramo entre Turín (Italia) y Lyon (Francia) del Tren de Alta Velocidad (TAV) europeo.
La fiscalía acusó a Incalza, que durante los últimos siete gobiernos ha sido funcionario del ministerio de Infraestructuras y Trabajos Públicos, de ser el principal “artífice” del sistema corrupto.
Aunque Lupi no está entre los acusados, su nombre salió a relucir en varias interceptaciones telefónicas que comprobaron que uno de los empresarios arrestados regaló al hijo del ministro un reloj Rolex por valor de 10 mil euros y lo colocó en una sociedad de la construcción primero en Italia y después en Nueva York.
Según los investigadores, Lupi pidió directamente al empresario detenido conseguir empleo a su hijo, mientras que la red de corrupción pagó al menos un viaje en avión a su esposa.
En las declaraciones a “Porta a Porta”, Lupi aseguró que su renuncia reforzará al gobierno, aunque precisó que Renzi no le pidió directamente la dimisión.