Caracas.- El gobierno venezolano debe ser más estricto para imponer controles y fiscalizaciones ante la ola de escasez incitada por las cadenas de supermercados y comercios, advirtió hoy la dirigente comunista, Vladimira Moreno.
“El llamado es a acelerar los procesos de control, de fiscalización, a no entregarles las importaciones de los rubros de primera necesidad alimentarios y de higiene a las cadenas de distribución de alimentos”, explicó Moreno.
Lamentó que “el gobierno ha sido muy blandengue (blando)” a la hora de imponer los controles de precios y distribución sobre las cadenas importadoras y de supermercados, a las que acusó de participar en un “golpe económico”.
“Indudablemente que estamos viviendo un golpe económico (…) ¿En qué consiste? Sencillamente que la distribución no atiende a la demanda, sino que es a cuentagotas de las cadenas de supermercados”, denunció.
La concejal metropolitana de Caracas abundó en que esta distribución “a cuentagotas” ha causado las grandes colas que se han reportado en los primeros días del año, y formaría parte de un plan de “manipulación psicológica al pueblo” para desesperarlo.
Las filas en los mercados, que en algunos casos llegan a ser kilométricas, se deben a la escasez de algunos productos como carne, pollo, jabón o pañales, pero de momento se desconoce la razón del repentino repunte de la escasez.
Esta situación se produce mientras el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, se encuentra en una gira internacional y de momento el gobierno sólo ha respondido desplegando un operativo policial para impedir escenas caóticas en los supermercados.
Moreno recalcó que “el gobierno no puede permitir esas colas, hay que hacer algo, ya que esto forma parte de un plan orquestado por Estados Unidos, con el apoyo de la oposición interna, para poner fin a la revolución bolivariana”.
“No podemos obviar que esta burguesía tiene unos intereses nacionales y unos mayores de la burguesía internacional, sobre todo del imperialismo estadunidense con nuestras riquezas, especialmente del petróleo, y por eso nos quieren golpear”, subrayó.
La dirigente comunista abundó en que el plan utilizaría medios como el acaparamiento, retrasos en la distribución y el contrabando de extracción a países vecinos, como medios para generar una escasez “artificial” y crear descontento contra el gobierno.
El gobierno debería responder, argumentó Moreno, organizando una campaña informativa en los medios del Estado para alertar a la población, así como retirar las importaciones de las cadenas de alimentos para entregarlas a los consejos comunales.
Moreno sostuvo que, en el mediano y largo plazos, debería implementarse un plan para “industrializar desde el punto de vista agropecuario” la economía, para evitar depender tanto de las importaciones que se prestan a corruptelas y contrabando.