La vacuna de Pfizer-BioNTech contra covid-19 solicitó permiso para aplicar una tercera dosis debido a las variaciones que circulan por el mundo, una de ellas Delta, la cual ha demostrado que puede evadir acciones al sistema inmunológico, según informó en un comunicado el laboratorio.
De acuerdo con el comunicado, Pfizer-BioNTech ha visto datos alentadores en un ensayo clínico de refuerzo que han estado realizado sobre una tercera dosis de la vacuna contra covid-19, por lo que pidió que se aplicara este refuerzo como parte de combatir la inmunidad contra covid-19.
“Los datos iniciales del estudio demuestran que una dosis de refuerzo administrada seis meses después de la segunda dosis tiene un perfil de tolerabilidad constante al tiempo que provoca inmunización alta contra la variante Beta, que son de 5 a 10 veces más altos que después de dos dosis primaria”.
Según se informa en el comunicado, las empresas esperan publicar datos definitivos pronto, así como en una revista revisada por pares y planean enviar los datos a la FDA, la EMA y otras autoridades reguladoras en las próximas semanas.
Con respecto al artículo de investigación en la revista Nature, la farmacéutica informó que el documento demuestra que los sueros inmunes obtenidos poco después de la dosis de la serie de dos dosis primarias de BNT162b2 tienen fuertes títulos de neutralización contra la variante Delta (linaje B.1.617.2) en pruebas de laboratorio.
“Las empresas anticipan que una tercera dosis aumentará aún más esos títulos de anticuerpos, similar al rendimiento de la tercera dosis para la variante Beta (B.1.351). Pfizer y BioNTech están realizando pruebas preclínicas y clínicas para confirmar esta hipótesis.”, mencionó.
Desarrollan actualización de vacuna contra variante Delta
La farmacéutica también adelantó que a pesar de que su vacuna tiene potencial de preservar los niveles más altos de eficacia contra todas las variantes de covid-19, incluida Delta, se está desarrollando una versión actualizada de la vacuna que se dirige a la proteína S de la variante.
El primer lote de ARNm para la prueba ya se ha fabricado en las instalaciones de BioNTech en Mainz, Alemania. Las compañías anticipan que los estudios clínicos comenzarán en agosto, sujetos a aprobaciones regulatorias.
La farmacéutica informó que la eficacia de la vacuna para prevenir tanto la infección como la enfermedad sintomática ha disminuido seis meses después de la vacunación, aunque la eficacia para prevenir enfermedades graves sigue siendo alta.
Durante este período, la variante Delta se está convirtiendo en la variante dominante en Israel, así como en muchos otros países. Estos hallazgos son consistentes con un análisis en curso del estudio de fase 3 de las empresas.
“Es por eso que hemos dicho, y seguimos creyendo que es probable, según la totalidad de los datos que tenemos hasta la fecha, que se necesite una tercera dosis dentro de los 6 a 12 meses posteriores a la vacunación completa. Si bien la protección contra la enfermedad grave se mantuvo alta durante los 6 meses completos, se espera una disminución de la eficacia contra la enfermedad sintomática con el tiempo y la aparición continua de variantes”, mencionó el comunicado.
¿Qué contiene la vacuna de Pfizer?
¿AR qué? No, no tiene que ver con una especie de droide de una película galáctica, el ARN mensajero (o ARNm), el cual se encuentra en la vacuna, actúa en el ribosoma de la célula, el cual transformará ese ARN (que contiene parte del código genético del SARS-CoV-2) en proteína S para que el cuerpo reconozca el virus.
A diferencia de las vacunas convencionales, como la de virus atenuados y la de virus muertos, ésta no contiene ningún virus vivo ni las partes del virus que puedan enfermar a una persona.
(milenio.com)
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