Washington.- La Asamblea General de la Organización de los Estados Americanos (OEA) eligió hoy a ocho nuevos miembros para ocupar cargos en los dos organismos del sistema interamericano de derechos humanos.
En votación, los 35 países miembros de la OEA eligieron a cuatro nuevos comisionados a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que asumirán en enero de 2016.
Se trata de los juristas Esmeralda Arosamena de Troitiño, de Panamá; Francisco Eguiguren Praeli, de Perú; Enrique Gil Botero, de Colombia, y Margaret May Macaulay, de Jamaica.
Otros dos candidatos, Douglas Mendes, de San Kitts y Neivis, y Sandra Soriano Bascopé, de Bolivia, no alcanzaron los 18 votos que requería su elección.
La candidatura boliviana había sido cuestionada por algunas organizaciones de la sociedad civil, a pesar de la defensa del canciller de su país, David Choquehuanca.
“Bolivia trae a este espacio a una de nuestras mejores profesionales”, dijo el canciller, al cuestionar el derecho de expertos externos para “atropellar la decisión soberana de un país”.
La Asamblea también eligió a cuatro nuevos miembros de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, incluyendo el actual presidente de la Primera Corte Constitucional de Ecuador, Patricio Pazmiño Freire, quien tuvo la mayor de las votaciones de los cinco candidatos.
También fueron electos para la Corte IDH Elizabeth Odio Benito, de Costa Rica; Eduardo Vio Grossi, de Chile, y Eugenio Raúl Zaffaroni, de Argentina.
Katya Salazar, directora ejecutiva de la Fundación para el Debido Proceso (DPLF), se dijo sorprendida por la ausencia de un mecanismo que permitiera a las organizaciones de la sociedad civil hacer una valoración y conocer a los candidatos.
“Hubo un retroceso brutal desde el último proceso de selección que hubo hace dos años donde todos los candidatos se presentaron aquí (en la sede de la OEA), expusieron sus puntos de vista y recibieron preguntas y comentarios de la sociedad civil y gobiernos” recordó.
Salazar dijo que los candidatos para esta elección cumplen el perfil profesional, pero “no podemos permitir que los buenos comisionados, los buenos jueces, entren casi casi por la buena suerte. Tiene que haber un proceso abierto, transparente para poder conocerlos”, dijo.