No hay señales de que las nuevas variantes del coronavirus afecten el impacto inmunológico de una vacuna que China acaba de autorizar para uso público, dijo el viernes un funcionario de control de enfermedades.
La vacuna producida por una filial de la empresa estatal Sinopharm fue aprobada el jueves, un día después de la noticia del primer caso importado en China de una variante que se propaga en Gran Bretaña.
“No hay necesidad de entrar en pánico”, dijo a la televisión estatal Xu Wenbo, funcionario del Centro Chino para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
“La variante mutada, en comparación con las variantes mutadas anteriores (…) no tiene ningún cambio obvio hasta ahora en su capacidad para causar enfermedades”, agregó.
Dijo que no se había detectado ningún impacto de las variantes en el efecto inmunológico de la vacuna.
La variante, que los científicos británicos han denominado VUI-202012/01, incluye una mutación genética en la proteína espícula, que teóricamente podría resultar en una propagación más fácil de la enfermedad del COVID-19.
Xu agregó que la mutación en la proteína del virus no afectaría la sensibilidad de la mayoría de las pruebas COVID-19 fabricadas en China que se dirigen a los ácidos nucleicos del virus, que transportan información genética.
(24-horas.mx)