Dallas.- Madres de familia recluidas en un centro federal de detención de migrantes en el sur de Texas exigen su liberación y unas 40 de ellas iniciaron una huelga de hambre esta Semana Santa, denunció hoy la Unión de Libertades Civiles de América.
Las mujeres, internadas en el Centro Residencial del Condado de Kernes, en Karnes City, al sureste de San Antonio, “protestan contra la política de no liberación de la administración Obama”, explicó el director ejecutivo de la Unión de Libertades Civiles de América (ACLU) en Texas, Terri Burke.
El activista afirmó que dicha política “es una estrategia de disuasión agresiva, adoptada tras la ola de migrantes registrada el verano pasado con cientos de madres y niños que cruzaron la frontera para ingresar a Estados Unidos”.
“La política general de no liberación de la administración (del presidente Barack) Obama es una violación de la ley y de los reglamentos federales de inmigración”, sostuvo Burke.
Asimismo, señaló que dicha política viola la Quinta Enmienda de la Constitución de Estados Unidos, “que prohíbe la detención generalizada de los solicitantes de asilo”.
Las mujeres en huelga de hambre y las otras detenidas son migrantes provenientes en su gran mayoría de países de Centroamérica, que han permanecido recluidas junto con sus hijos desde el verano pasado, luego de haber presentado sus solicitudes de asilo en este país.
“El año pasado, estas mujeres y sus hijos huyeron de la violencia extrema, las amenazas de muerte, las violaciones y la persecución en Centroamérica y llegaron a Estados Unidos en búsqueda de su seguridad”, aseveró Burke.
De acuerdo con funcionarios de migración y jueces que han evaluado a las mujeres, éstas tendrían un “temor creíble” de persecución en sus países, por lo que habría una “posibilidad significativa” de que se les conceda asilo, según el directivo de la ACLU.
La huelga de hambre coincide con una demanda interpuesta por el Proyecto por los Derechos de Inmigrantes de la ACLU, la Escuela de Leyes de la Universidad de Texas en Austin y el despacho de abogados Corvington & Burling LLP, en contra de la política de no liberación del gobierno federal.
Además, la semana pasada obispos católicos y luteranos evangélicos pidieron a la administración Obama detener la práctica de mantener detenidas a familias de migrantes, al argumentar los efectos nocivos que esto causa en las madres, los niños y la moral de la sociedad.
La petición fue formulada por los obispos Gustavo García-Siller, de San Antonio; Eusebio Elizondo, de Seattle, y James Tamayo, de Laredo, además de Michael Rinehart y H. Julián Gordyobispos, de la Iglesia Evangélica Luterana en América.
Los prelado realizaron el pedido luego de que efectuaran una visita a otro de los centros de detención de inmigrantes, ubicado en la comunidad de Dilley, en el sur de Texas.