Puerto España.- La Unidad de Investigaciones Sísmicas de la Universidad de las Indias Occidentales de Trinidad y Tobago emitió una alerta naranja para el Caribe ante la posibilidad de una nueva erupción del volcán submarino Kick’em Jenny en las próximas horas.
El incremento de actividad en el volcán, localizado a ocho kilómetros de Granada, condujo a las autoridades trinitenses a llevar a cabo una mayor vigilancia en las costas norte y este del país, aunque descartan que represente una amenaza seria.
Kick’em Jenny registró actividad eruptiva la madrugada del jueves, desencadenando una serie de temblores de tierra que se percibieron en Trinidad y Tobago, así como en varios países del Caribe.
“Desde ayer continúan registrándose un gran número de terremotos asociados a la actividad volcánica”, declaró Joan Latchman, director de la Unidad de Investigaciones Sísmicas, y señaló que éstos movimientos son indicios de un episodio volcánico.
Refirió que en el pasado las erupciones del Kick’em Jenny no han afectado negativamente las zonas costeras de la región, por lo que no representaría ninguna amenaza grave para Trinidad y Tobago ni para las islas vecinas, aunque sugirió mantenerse atentos.
Aclaró sin embargo que sí afectaría a los barcos y a los intereses marítimos, por lo que pidió precaución a las embarcaciones que están en esa zona.
Indicó que la actividad en el volcán se mantiene debajo de la superficie del mar, pero “siempre es prudente estar alerta y prestar atención a las advertencias que vienen de otras oficinas regionales de desastre.
Kick’em Jenny, el único volcán submarino vivo en el este del Caribe, registró su primera erupción en 1939 y tiende a entrar en esos episodios cada 10 a 11 años, contabilizándose desde entonces 12 eventos a la fecha, la anterior a ésta se produjo en diciembre de 2001.
La actual actividad sísmica comenzó el pasado 11 de julio y ha continuado, registrándose más de 200 temblores micros y pequeños de distintas magnitudes, al tiempo que se ha constatado la liberación de burbujas de gas en el agua.
Responsables de la gestión de desastres del país precisaron que el único impacto que podría esperarse del evento eruptivo sería un alto oleaje en las áreas costeras, pero no un tsunami como tal, en especial en las islas de Granada y San Vicente y las Granadinas.
Las autoridades de esas islas se mantienen en alerta recomendando precaución a embarcaciones y zonas costeras, mientras que Dominica, Martinica, Barbados y Santa Lucía permanecen atentos al desarrollo de la situación.
En Venezuela, la Fundación de Investigaciones Sismológicas (Funvisis), encargada de monitorear al Kick’em Jenny, también alertó de la posibilidad de fuerte oleaje en las costas del país, pero especificó que dependerá del tipo de erupción que se registre.
El director nacional de Protección Civil de Venezuela, Luis Díaz Curbelo, afirmó que por ahora no hay alerta de tsunami en el Caribe por los movimientos del volcán, ya que sólo se produciría en caso de un sismo superior a los 5.0 grados Richter y “eso no ha ocurrido”.
Curbelo aclaró la declaración nocturna del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, quien escribió en su cuenta de Twitter estar “en comunicación con gobernadores, jefes militares y Protección Civil haciendo seguimiento a alerta de tsunami en el Caribe”.
“Se han tomado todas las medidas para actuar en cualquier circunstancia, debemos tener calma y estar atentos a la evolución de la situación”, agregó Maduro.
Curbelo enfatizó que hay una situación de prevención y que todos los organismos venezolanos están en alerta para solventar cualquier acontecimiento, al igual que los gobiernos de todas esas islas han tomado medidas preventivas.