El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) está “profundamente preocupado” por la acumulación de uranio enriquecido y la posible presencia de material nuclear en un laboratorio no declarado en Irán.
“La presencia de partículas de uranio antropogénico (generado por la actividad humana) no declaradas por Irán refleja claramente la presencia de materia nuclear y/o de equipamiento contaminado por materia nuclear en este lugar”, asegura la agencia.
“Después de 18 meses, Irán sigue sin dar las explicaciones necesarias, completas y técnicamente creíbles”, añade el OIEA, en cuyo informe precisa que su director, el argentino Rafael Grossi, está “preocupado por la falta de avances” sobre esta cuestión.
El OIEA ya había señalado la presencia de este laboratorio no declarado en el distrito de Turquzabad en Teherán en su informe de noviembre, en el que consideraba que las explicaciones de la República Islámica “no eran creíbles”.
Además, la agencia de la ONU también tuvo constancia que Irán dispone de existencias de uranio enriquecido 14 veces por encima del límite autorizado por el acuerdo nuclear de 2015, según un informe consultado por la agencia francesa de noticias AFP en Viena, que el miércoles será discutido por el Consejo de gobernadores de este organismo.
El OIEA advierte que Irán ha acumulado hasta 2.967,8 kilos de uranio enriquecido, mientras que el límite establecido por el pacto de 2015 es de 202,8 kilos.
Tensión por ley que limita inspecciones
La revelación de este nuevo informe se produce en un momento de tensión entre Irán y los países occidentales, después de que entrara en vigor este martes una ley en la República Islámica que limita las inspecciones de la agencia de la ONU.
Las autoridades iraníes empezaron a desentenderse de las obligaciones del acuerdo nuclear en 2019, un año después de la salida unilateral de Estados Unidos y del restablecimiento de sanciones.
Teherán anunció en enero que enriquecería uranio hasta el 20%, lo que representa su mayor incumplimiento del pacto. Y un mes más tarde empezó a producir uranio de metal, un material que puede utilizarse en la fabricación de armas nucleares.
A pesar de haberlo negado en múltiples ocasiones, las autoridades iraníes son acusadas de querer dotarse de una bomba atómica, sobre todo por parte de Israel, su archienemigo.
Condena de Reino Unido, Francia y Alemania
El Reino Unido, Francia y Alemania “lamentan profundamente” la restricción “peligrosa” de las inspecciones del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) sobre las actividades nucleares en Irán, según un comunicado conjunto difundido este martes.
“Instamos a Irán a que detenga y revierta todas las medidas que reduzcan la transparencia y que coopere absolutamente con el OIEA”, declararon los jefes de la diplomacia de estos tres países, cofirmantes del acuerdo de 2015 con Estados Unidos, Rusia y China.
Además, subrayan que su “objetivo continúa siendo preservar el acuerdo y apoyar los esfuerzos diplomáticos en busca de una solución negociada, que permitan a Irán y Estados Unidos regresar al respeto pleno de sus compromisos” asumidos.
Tras la retirada unilateral del acuerdo de Viena de la administración estadounidense de Donald Trump y el restablecimiento de sus sanciones contra Teherán que asfixian a su economía, Irán se ha ido liberando progresivamente de sus compromisos nucleares.
El país adoptó estas limitaciones tras expirar el plazo establecido por Teherán para el levantamiento de todas las sanciones estadounidenses.
El nuevo presidente estadounidense, Joe Biden, ha prometido refrendar nuevamente este acuerdo, pero bajo la condición de que Teherán vuelva antes a respetar los compromisos de los que había comenzado a distanciarse en respuesta a las sanciones de Trump.
(dw.com)