París.- La Fiscalía de Marsella abrió hoy una investigación judicial por el homicidio involuntario de 150 personas que viajaban a bordo del avión de la compañía aérea Germanwings, que se estrelló en Los Alpes franceses en marzo pasado.
El fiscal Brice Robin anunció la semana pasada su intención de iniciar una investigación después de reunirse con las familias de las víctimas en París, pero aclaró que el derecho penal francés prohibe abrir una investigación penal por asesinato porque el autor murió.
Según Robin, los jueces deberán responder a “¿cómo conciliar el secreto médico con la información que debería tener la autoridad de control y el empleador sobre el estado de salud particularmente frágil de un empleado que es un piloto y tiene grandes responsabilidades?”.
El fiscal detalló ampliamente los elementos establecidos por la investigación sobre el estado de salud del copiloto del vuelo de Germanwings, Andreas Lubitz, quien intencionalmente estrelló el avión en una montaña aprovechando la ausencia del piloto en la cabina.
Refirió que Lubitz sufrió depresión en 2008 y 2009, y que el día del percance “estaba consciente de su salud y tenía miedo de perder la vista”, además en un mes antes del accidente, el copiloto vio en siete ocasiones a los médicos, incluidas tres visitas al psiquiatra.
Robin recordó que algunos de esos médicos brindaron su testimonio en audiencia pública con las autoridades judiciales alemanas, de acuerdo con reportes del periódico francés Le Figaro.