La caída en el índice de agosto es una buena noticia para la Casa Blanca y la campaña electoral de la vicepresidenta Kamala Harris, atacada por su rival Donald Trump por la crisis del costo de la vida
La inflación en Estados Unidos cayó a 2.5 por ciento en agosto, lo que prepara el terreno para que la Reserva Federal comience a recortar las tasas de interés gradualmente en su reunión de la próxima semana.
El último índice anual de precios al consumidor se comparó con el ritmo de 2.9 por ciento de julio y estuvo ligeramente por debajo de la estimación de 2.6 por ciento de los economistas encuestados por Reuters.
Los datos de inflación marcan uno de los últimos comunicados económicos importantes antes de la reunión de la Fed del 18 de septiembre y pavimentan el camino para un esperado recorte de un cuarto de punto a las tasas de interés, que se encuentran en un máximo de 23 años en el rango de 5.25 a 5.5 por ciento.
La evidencia de que la inflación se mueve hacia el objetivo de 2 por ciento de la Fed es una buena noticia para la Casa Blanca y la campaña electoral de la vicepresidenta Kamala Harris, a la que su su rival republicano Donald Trump critica por la crisis del costo de vida en EU.
“La desinflación es un proceso imperfecto, pero sin duda está ocurriendo”, dijo Kristina Hooper, estratega jefe de mercados globales de Invesco. “Creo que (el recorte de septiembre) será de 25 puntos básicos porque creo que la economía está sobre una base relativamente sólida”.
El IPC básico, que excluye los volátiles precios de los alimentos y la energía, se mantuvo estable en 3.2 por ciento, de acuerdo con los datos de la Oficina de Estadísticas Laborales. En comparación con el mes pasado, los precios básicos aumentaron 0.3 por ciento, un poco más rápido de lo que esperaban los economistas.
Las acciones estadunidenses cerraron al alza, revirtiendo las caídas de la jornada anterior. El S&P 500 sumó 1.1 por ciento, mientras que el Nasdaq Composite avanzó 2.2 por ciento, con el fabricante de chips Nvidia subiendo 8 por ciento, y otros nombres de las grandes tecnológicas con ganancias menores. El Dow Jones ganó 0.3 por ciento.
El rendimiento de los bonos del Tesoro a dos años, que sigue de cerca las expectativas sobre las tasas de interés, subió 0.0 puntos porcentuales hasta 3.65 por ciento, lo que refleja una pequeña caída en el precio.
Los operadores aumentaron sus apuestas sobre un recorte de un cuarto de punto la próxima semana después de que se publicaran las cifras de inflación, lo que aumentó la probabilidad implícita de un movimiento de ese tipo pasando de alrededor de 70 a 85 por ciento.
Pero aunque los operadores dieron marcha atrás de las expectativas anteriores de un recorte de medio punto, los mercados de futuros de los fondos de la Reserva Federal aún anticipan que las tasas van a bajar todo un punto porcentual para fin de año.
El aumento mensual de 0.2 por ciento en la cifra de inflación de agosto se impulsó principalmente por un incremento de 0.5 por ciento en el llamado índice de vivienda, que le da seguimiento a los gastos relacionados con los hogares. Eso marcó una aceleración después de varios meses de aumentos más lentos.
Los precios de la energía cayeron 0.8 por ciento durante el mes, mientras que los precios de los alimentos aumentaron un 0.1 por ciento. La inflación de los servicios, una vez que se excluyen los costos de la energía, aumentó 0.4 por ciento. Las tarifas aéreas también aumentaron, al igual que los costos de la ropa.
Lael Brainard, asesora económica nacional del presidente Joe Biden, dijo que el último informe muestra que EU le estaba “dando la vuelta a la página en materia de inflación”, que según ella ahora está “regresando a niveles cercanos a la normalidad”.
A medida que aumentan las pruebas de que la inflación está regresando al objetivo, los funcionarios de la Fed centran su atención en apuntalar el mercado laboral, en lugar de controlar las presiones sobre los precios.
El mes pasado, un informe de nóminas de julio poco brillante desató temores de una recesión económica en EU, lo que provocó apuestas de que el banco central podía considerar un recorte de medio punto más grande de lo habitual en septiembre.
Sin embargo, en las últimas semanas esas apuestas se redujeron.
En los datos de agosto, que se publicaron el viernes pasado, se muestra que los empleadores estadunidenses sumaron 142 mil nuevos puestos de trabajo ese mes, un marcado aumento respecto de la cifra revisada a la baja de solo 89 mil de julio, aunque todavía por debajo de los pronósticos de consenso.
“La economía va bien y si se recortan demasiado y demasiado rápido las tasas de interés se corre el riesgo de que la inflación vuelva a subir”, dijo Torsten Slok, economista jefe de Apollo.
Describió las cifras de inflación como “un balde de agua fría ante el mercado de bonos, que se ha dejado llevar por la historia de la desaceleración”.
Los funcionarios de la Fed dicen que la evidencia de un deterioro más agudo en el mercado laboral podría empujar al banco central a recortar las tasas de forma más agresiva.
La semana pasada, John Williams, de la Fed de Nueva York, y el gobernador Christopher Waller, subrayaron que no parecía probable una recesión para la economía más grande del mundo.
Williams afirmó que la política monetaria está “bien posicionada” para responder a cualquier deterioro del mercado laboral, mientras que Waller dijo que espera que los recortes de tasas se hagan “con cuidado”, en comentarios que parecía indicar que ambos se sienten cómodos con un recorte de un cuarto de punto la próxima semana.
Pero agregó, “si los datos sugieren la necesidad de recortes más grandes, entonces los apoyaré”.
El presidente ejecutivo de Goldman Sachs,David Solomon, dijo a CNBC que el banco espera que la Fed reduzca la tasa 0.25 puntos porcentuales, pero “creo que se pueden defender los argumentos a favor de 50 puntos básicos basándose en un poco más de suavización en el mercado laboral”.
(milenio.com)