El huracán Beryl, el segundo ciclón de la temporada en el Océano Atlántico, captó la atención de las autoridades luego de que dejara de ser una simple tormenta tropical.
A pesar de que originalmente se había informado que afectaría sólo a la región del Caribe, específicamente en las Islas de Barlovento, en México causó preocupación ya que su formación y trayectoria apuntan a las costas mexicanas de Quintana Roo y Yucatán, donde no se descarta que cause afectaciones.
¿Cuándo evolucionó Beryl a huracán?
Durante la tarde del sábado 29 de junio, el Centro Nacional de Huracanes informó que la tormenta tropical Beryl evolucionó a huracán uno.
Con esto, se esperan vientos destructivos con fuerza de huracán y mareas ciclónicas potencialmente mortales, advirtió la organización que compartió cómo se ve Beryl desde el espacio.
¿Qué es un huracán?
Según Conagua, el huracán es la cuarta y última etapa que puede alcanzar un ciclo tropical. Sus principales características son:
Vientos de 119 kilómetros por hora en adelante.
El área nubosa que alcanza va de 500 a los 900 kilómetros de diámetro.
Un ojo de huracán con un diámetro alrededor de 24 a 40 kilómetros.
Entre otras cosas que destacan en este fenómeno existe la presencia de lluvias torrenciales, oleaje alto y marea de tormenta.
Una vez alcanzada la categoría uno del huracán, los vientos máximos van de los 119 a los 153 kilómetros por hora, mientras que su presión central es mayor a los 980 milibares.
La marea de tormenta puede presentar un oleaje de 1,2 a 1,5 metros, mientras que se advierten daños potenciales a casas móviles, árboles, arbustos, señalización débil, inundaciones en carreteras costeras, daños leves en muelles y daños tenues en edificios.
(milenio.com)