Madrid.- El expresidente del gobierno español, Felipe González, anunció hoy aquí que volverá a Venezuela para apoyar en la defensa de los políticos de oposición presos y que buscará amparo en los pactos internacionales.
En rueda de prensa en la Asociación de la Prensa de Madrid, a su regreso de la visita que realizó a Venezuela esta semana, comentó que se cumplieron los objetivos de la misma y que no salió huyendo de Caracas como calificó el presidente venezolano Nicolás Maduro.
“Voy a seguir ejerciendo el derecho de un demócrata a ver a los demócratas que quiera ver”, dijo el exmandatario (1982-1996) quien consideró que nadie la puede impedir el diálogo con políticos presos, sus familias y opositores.
Explicó que a pesar de que la crítica internacional a Maduro por la situación de los presos es superior en Europa que en América Latina, “hay en la región latinoamericana una creciente inquietud por la situación venezolana”.
De su visita a Venezuela, comentó que trató de realizarla con bajo perfil, pero a pesar de la cobertura mediática le impresionó la reacción del régimen venezolano y del presidente Maduro quien le acusó de injerencia en asuntos del país.
Consideró que lo visto en Venezuela quizá tenga comparación con la situación que han vivido algunos países del este de Europa, y lo que más le indignó fue lo que tienen que vivir las familias de los presos, lo mismo que mucha gente allí.
“Quiero decirle (a Maduro) que él es el responsable de la catástrofe de Venezuela, en seguridad, en crisis social y económica, y en libertades básicas”, expresó.
“Frente a una dictadura uno sabe a que atenderse, pero frente a una democracia traicionada uno no sabe a qué atenerse porque es el reino de lo arbitrario, no se sabe lo que va a pasar mañana”, dijo.
Cuestionó que Maduro se niegue a calificar como presos políticos a Leopoldo López, Antonio Ledezma y otros, porque “están presos por ser políticos”.
Apuntó que a pesar de que a mucha gente, dentro y fuera, de Venezuela le extraña lo que sucede en el país sudamericano su conclusión es que a Caracas le falta diálogo y reconciliación, y para eso se necesita un ambiente “en libertad, con medios plurales y restitución de la democracia”.
Aclaró que como el gobierno de Maduro no quiere dialogar con la oposición, lo que procede es que las próximas elecciones que se realizarán a finales de año permitan que el 5 de enero se constituya una Asamblea Nacional que de opción para empezar a generar cambios en el país.
“Hay esperanza. Las reuniones que he sostenido me dan esperanza también por la opinión pública latinoamericana”, enfatizó.
En la rueda de prensa González estuvo acompañado por el presidente del diario El Nacional de Venezuela, Miguel Henrique Otero, John Muller, de El Universal y la mesa de la Asociación de Periodistas Venezolanos en España.