Washington.- El presidente de Estados Unidos tiene la prerrogativa de hacer uso del poder legal que le otorga la Constitución mediante las órdenes ejecutivas, destacó hoy el experto John Hudak.
Estados Unidos vive una disputa entre el Congreso y la Casa Blanca por la orden ejecutiva del presidente Barack Obama, que ofrece alivio temporal a más de cuatro millones de inmigrantes indocumentados al impedir su deportación y permitirles tener trabajo legal.
Es “definitivamente un poder legal perfectamente constitucional, sostenido una y otra vez por la Constitución de Estados Unidos como un poder presidencial”, señaló Hudak, del Departamento de Estudios de Gobernabilidad de Brookings Institution.
Los republicanos sostienen que la acción ejecutiva dictada en noviembre es inconstitucional, y para evitar su implementación, han rehusado autorizar un presupuesto completo al Departamento de Seguridad Nacional (DHS), encargada de aplicar las medidas de alivio.
El Congreso, bajo control republicano, autorizó recursos al DHS que vencen el próximo 27 de febrero, y de no autorizarse el presupuesto para todo el año fiscal 2015, la agencia cerraría operaciones.
Hudak explicó en rueda de prensa que las órdenes ejecutivas deben tener el respaldo de una ley que puede provenir del Congreso, estar estipulada en la Constitución o dictaminada por las cortes.
Apuntó que una orden ejecutiva busca cambiar políticas o aclarar una ley vigente y hacerla más efectiva, y tiene el mismo poder y significación que una legislación aprobada en el Congreso.
El presidente ha defendido la legalidad de sus medidas, que adoptó ante la inacción del Congreso para reparar el sistema migratorio disfuncional, e invitó a los legisladores a aprobar una reforma migratoria.
Hudak reconoció que el uso de las órdenes ejecutivas tiende a crear fricciones con el Legislativo, porque es una acción unilateral que “esencialmente ignora los deseos del Congreso”.
El experto señaló que los poderes ejecutivos prevén medios como la orden ejecutiva, la emisión de memoranda ejecutiva, el veto a legislaciones, la acción regulatoria, la proclama presidencial o la declaración firmada.
Apuntó que a través de los años, el Congreso ha otorgado a la rama Ejecutiva y al presidente una enorme discrecionalidad sobre la interpretación y ejecución de la ley.
Hudak rechazó la afirmación de los republicanos de que Obama haga uso excesivo de la orden ejecutiva, y señaló que mandatarios como Ronald Reagan, William Clinton y Franklin D. Roosevelt hicieron mayor uso, y negó que una alta cantidad de órdenes emitidas represente un exceso.
Ha habido presidentes que emiten gran número de órdenes ejecutivas ceremoniales, y otros que emiten cinco o seis con gran alcance político, explicó, y precisó que Obama ha hecho uso balanceado de esta facultad entre ambos términos.
Apuntó que la primera acción ejecutiva la emitió el presidente George Washington para asuntos de política exterior.
Recordó que desde la década de 1930 ha crecido la función interna del mandatario, porque hasta entonces el presidente eran principalmente un actor de la política exterior.
La administración Obama iniciará la implementación del nuevo programa ampliado de Acción Diferida para Llegados en la Infancia (DACA) el 20 de febrero y del programa para padres de ciudadanos o residentes (DAPA) el 20 de mayo.