El Departamento de Estado de Estados Unidos emitió una advertencia de viaje a sus ciudadanos sobre las peligrosas píldoras falsificadas que se venden en las farmacias de México, y que a menudo contienen fentanilo.
La alerta de viaje, publicada el viernes, sostiene que los viajeros estadunidenses deben “tener cuidado al comprar medicamentos en México”.
Las pequeñas farmacias en áreas turísticas y regiones fronterizas a veces venden fármacos anunciados como OxyContin, Percocet, Xanax y otros sin necesidad de receta.
El Departamento de Estado advirtió que tales píldoras a menudo son falsificadas y que “pueden contener dosis mortales de fentanilo”.
“Las píldoras falsificadas se anuncian fácilmente en las redes sociales y se pueden comprar en farmacias pequeñas que no pertenecen a cadenas en México, a lo largo de la frontera y en áreas turísticas”, alertó.
Según un estudio dirigido por investigadores de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA), el 68 por ciento de las 40 farmacias mexicanas visitadas en cuatro ciudades del norte de México vendían oxicodona, Xanax o Adderall, y que el 27 por ciento de esas farmacias vendía pastillas falsas.
La UCLA dijo que el estudio, publicado en enero, encontró que “las farmacias tradicionales en las ciudades turísticas del norte de México están vendiendo píldoras falsificadas que contienen fentanilo, heroína y metanfetamina.
Estas píldoras se venden principalmente a turistas estadunidenses y, a menudo, se hacen pasar por sustancias controladas como oxicodona, Percocet y Adderall”.
“Estas píldoras falsificadas representan un grave riesgo de sobredosis para los consumidores, quienes creen que están obteniendo una cantidad conocida de un medicamento más débil”, advirtió Chelsea Shover, profesora asistente y residente de Medicina en la Facultad de Medicina David Geffen de la UCLA.
La evidencia anecdótica indica que el problema también existe en ciudades turísticas como Playa del Carmen y Tulum, no solo en las ciudades fronterizas.
El Departamento de Estado no respondió específicamente a una solicitud de comentarios sobre si algún estadunidense ha sufrido alguna sobredosis o ha muerto debido a las ventas de estos fármacos en México.
En cambio, en respuesta a la solicitud, un vocero del Departamento de Estado escribió que esa agencia “no tiene mayor prioridad que la seguridad de los ciudadanos estadounidenses en el extranjero. Nos tomamos en serio nuestro compromiso de proporcionar a los ciudadanos estadounidenses información clara, oportuna y confiable sobre todos los países del mundo para que puedan tomar decisiones de viaje informadas”.
(milenio.com)