El afamado cantautor Silvio Rodríguez, considerado la “conciencia crítica” de la revolución cubana, acaba de pronunciarse contra el pensamiento dogmático y el fanatismo que pueden lastrar el rumbo de la isla, en uno de los momentos más críticos de los últimos 60 años.
Silvio, como simplemente se le conoce dentro y fuera del país, hizo su alerta en presencia del mandatario Miguel Díaz-Canel, al recibir el título de Doctor Honoris Causa en Ciencias Sociales y Humanísticas de la Universidad de La Habana.
“Es significativo ver como tan temprano (como 1962) Fidel Castro, dirigiéndose a la juventud, hacía una crítica profunda a la simplificación de lo ideológico. Lo que quiere decir que no deseaba, para nuestro futuro, el predominio del pensamiento dogmático”, dijo.
Silenciado por la censura en sus inicios artísticos y caracterizado en los últimos años por sus evaluaciones críticas del manejo oficial de asuntos espinosos, como las manifestaciones contra el gobierno del verano de 2021, el trovador hizo alusión en su discurso de agradecimiento a un pronunciamiento de Castro en la emblemática universidad habanera.
“Yo fui uno más en aquella multitud que escuchaba (a Castro) cuando leyeron un texto de (el líder estudiantil) José Antonio Echeverría y omitieron la parte en que hablaba de Dios. Después Fidel hizo un discurso esencialmente anti-dogmático, que dedicó a los jóvenes, y mencionó a los que él llamó “mancos mentales”. Incluso criticó algunas consignas extremistas de entonces”, apuntó Silvio.
Sociólogos estiman que el pensamiento dogmático y el fanatismo de algunos partidarios del socialismo en la isla “lastran la originalidad que demanda el presente y el futuro del país, en estos tiempos de profunda crisis económica”.
El discurso de Fidel entonces, agregó por su parte Silvio, “revelaba contradicciones que después comprendí que, más que nuestras, eran humanas, porque en los 76 años que he vivido he visto obcecación y fanatismo en muchas formas de pensar”.
Silvio resumió así uno de los “cuatro instantes de mi vida que tienen que ver con esta honorable institución” y, ovacionado cerró sus palabras el viernes pasado con un poema de su autoría que comenzó de esta forma: “Nunca me creí importante y menos imprescindible”.
(milenio.com)